por: Jonás Rodríguez
27/09/2021 | 10:00 am
@Presidencia_VE
Este domingo, 26 de septiembre, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) exhortó a las autoridades de Chile a implementar medidas que contribuyan a eliminar las prácticas de xenofobia en el país.
Dicha solicitud fue emitida luego de que un grupo de chilenos quemó las pertenencias de una serie de migrantes, la mayoría de ellos venezolanos, en la ciudad de Iquique durante una protesta.
«La Cidh urge a Chile a adoptar medidas urgentes para prevenir y eliminar prácticas de xenofobia, así como a observar los principios que rigen el uso de la fuerza (…) Ello, a la luz del Principio de No Discriminación y de su Resolución 4/19. 4», detalló el ente.
De igual forma, la comisión expresó su rechazo al «violento» desalojo de personas migrantes, en su mayoría venezolanas, que se llevó a cabo en la Plaza Brasil, también en Iquique, un día antes. Entre los afectados figuran familias con niños.
«La Cidh expresa su preocupación por los actos xenofóbicos ocurridos en Iquique el 25 de septiembre, donde grupos ‘antinmigrantes’ prendieron fuego a las carpas y pertenencias de familias migrantes venezolanas, sin que la policía interviniera para impedir dichos hechos», precisó.
Finalmente, el organismo recordó que el uso de la fuerza por parte de los agentes estatales debe regirse por los principios de finalidad legítima, absoluta necesidad, proporcionalidad y progresividad.
Además, afirmó que el Estado debe actuar para «prevenir y eliminar cualquier acto discriminatorio» contra los migrantes.
Tras los hechos, varias organizaciones sociales en Chile pidieron al Gobierno austral cambiar su política migratoria para evitar que esta población sea agredida.
«De continuar con las actuales políticas migratorias se seguirá complejizando la convivencia entre las comunidades locales y migrantes (…) Nadie quiere que se perpetúe un círculo de irregularidad, exclusión e incluso violencia (…) Es urgente un cambio de timón en las políticas del Gobierno», destacó un comunicado conjunto firmado por 24 organizaciones sociales del país.
Por su parte, los representantes internacionales de Venezuela condenaron los actos y solicitaron a la comunidad extranjera abogar por el respeto a los migrantes.