por: María Fernanda Pérez
22/03/2025 | 3:00 pm
Foto de Rachel Park en Unsplash
El concepto anglosajón de «brunch» es mucho más que la simple suma de desayuno y almuerzo. Es una ingeniosa fusión culinaria, un ritual relajado que ha conquistado corazones y paladares, especialmente durante los fines de semana.
Ideado para aquellos que disfrutan de un merecido descanso matutino, el brunch se ha convertido en una experiencia social y gastronómica muy popular.
¿Qué es exactamente el brunch?
En esencia, el brunch es una comida completa que se disfruta a media mañana, generalmente entre las 10:00 y las 2:00 pm. Combina elementos típicos del desayuno, como huevos, tostadas, bacon, cereales y frutas, con platos más contundentes del almuerzo, como ensaladas, sándwiches, e incluso opciones más elaboradas como carnes o pescados.
La clave está en la variedad y la posibilidad de disfrutar de una comida abundante y relajada, sin las prisas de la mañana.
Foto de Alessandro Alimonti en Unsplash
La popularidad del brunch no es casualidad. Varios factores han contribuido a su auge:
Para muchos, el fin de semana es sinónimo de descanso. El brunch permite disfrutar de una mañana relajada sin tener que preocuparse por preparar el desayuno temprano. Es la excusa perfecta para levantarse con calma y disfrutar de una comida deliciosa sin presiones.
Asimismo, el brunch se ha convertido en una actividad social por excelencia. Es una oportunidad para reunirse con amigos y familiares en un ambiente distendido y disfrutar de una buena conversación mientras se degustan platos variados.
Muchos restaurantes y cafés han adaptado sus ofertas para incluir menús de brunch atractivos, convirtiéndose en puntos de encuentro populares.
A su vez, la popularización del brunch en países anglosajones, especialmente en Estados Unidos, ha tenido un impacto global. La cultura del brunch se ha extendido a otras partes del mundo, incluyendo Latinoamérica, donde ha sido bien recibida y adaptada a los gustos locales.