por: Elena Velásquez
21/07/2019 | 2:00 pm
El Mundo
El manzano bajo donde solía descansar el físico y matemático británico, Isaac Newton; pilar fundamental en la historia de la teoría de la gravedad, continúa vivo luego de más de cuatro siglos.
La tradición cuenta que el físico, solía sentarse debajo de un árbol de manzanas que se hallaba en la localidad de Woolsthorpe, Inglaterra, allí se dedicaba a descansar, pensar y observar el sitio; cuando un día, una manzana cayó al suelo y desató las preguntas en su mente.
Este hecho, habría sido el origen de sus ideas y el principio de sus estudios que derivaron en la Ley de Gravedad Universal, publicada en 1666; sin embargo, la historia del manzano y su protagonismo en el descubrimiento, no se conoció hasta después de la muerte de Newton, cuando uno de sus allegados comentó el hecho.
Entre los registros históricos que se guardan sobre este manzano está un dibujo que data de 1820, realizado por Charles Turner, donde se aprecia la ubicación del árbol con respecto a la casa de Woolsthorpe, donde se sabe que habitó Newton.
Actualmente, el jardín botánico Jardines de Kew, situado en Reino Unido, así como la Universidad de Nueva York y la Universidad de Cambridge, Inglaterra; poseen pequeños manzanos que nacieron a partir de un injerto del árbol del físico británico.