por: Jonás Rodríguez
23/03/2022 | 5:00 pm
La Vanguardia
Un grupo de investigadores de la Universidad de Melbourne (Australia) inició un proyecto para «resucitar» al extinto Tigre de Tasmania.
En este sentido, los involucrados detallaron que el pasado 01 de marzo, se efectuó la creación del Laboratorio de Investigación de Restauración Genética Integrada de Thylacine (Tigrr), esto después recibir una donación filantrópica de casi 5 millones de dólares.
El proyecto estará dirigido por el experto en tigres de Tasmania de la Universidad de Melbourne, Andrew Pask, quien aseguró que, aunque el objetivo principal es traer de vuelta al extinto animal, la biotecnología que se usará será fundamental para los esfuerzos de conservación de marsupiales en la actualidad.
«En realidad, necesitamos muchas de estas cosas para proteger a los marsupiales en este momento», destacó.
Cabe recordar que esta no es la primera vez que la ciencia intenta revivir al tigre de Tasmania, puesto que en 1999, el paleontólogo Michael Archer inició un trabajo para clonar a la especie a partir de ejemplares antiguos, sin embargo, el proyecto fue cancelado en 2005.
Según la información divulgada, los especialistas usarán en este proyecto una tecnología llamada Crispr, la cual permite «cortar y pegar» ADN, facilitando así la recreación de código genético antiguo.
No obstante, los especialistas detallaron que para resucitar al animal, es necesario comprender su código de ADN de forma precisa. Una vez se logre esto, los científicos podrían tomar células de una especie relacionada y usar Crispr para modificar el código.
En relación a ello, los autores del proyecto informaron que este primer paso ya fue completado, puesto que el equipo pudo decodificar el genoma completo del tigre de Tasmania en un estudio efectuado en 2017.
De acuerdo a las estimaciones de Pask, completar el diseño del tigre tardará mínimo «una década», puesto que «depende de los saltos en esa tecnología en los próximos años».
Por su parte, en relación a las múltiples críticas relacionadas a la «desextinción» del ejemplar, el estudiado comentó que en el caso del tigre de Tasmania se generarían muchos beneficios «evidentes».
Finalmente, en cuanto a la donación recibida, el equipo agradeció el interés por el proyecto y destacó que el mismo es vital para conservar otras especies.
«Gracias a esta generosa financiación, estamos en un punto de inflexión en el que podemos desarrollar tecnologías para recuperar una especie de la extinción y ayudar a salvaguardar a otros marsupiales al borde de la desaparición (…) La financiación permitirá que nuestro laboratorio avance», concluyó Pask.