por: Jonás RodrÃguez
29/12/2020 | 5:00 pm
@infobae
Una especialista de la Universidad de Aberdeen (Escocia) encontró, de manera fortuita, un antiguo fragmento de madera (dividido en pedazos) de 5 mil años de antigüedad que fue descubierto en el interior de la Gran Pirámide de Egipto y que se habÃa perdido hace aproximadamente 60 años.
El objeto, hallado por la arqueóloga y asistente de origen egipcio, Abeer Eladany; se encontró almacenado en la colección Asia del prestigioso instituto escocés, mientras se revisaba el muestrario.
«Cuando revisé los números en nuestros registros en Egipto, supe instantáneamente lo que era, y que efectivamente habÃa sido ocultado a simple vista en la colección equivocada (…) Nunca imaginé que serÃa aquÃ, en el noreste de Escocia, donde encontrarÃa algo tan importante para el patrimonio de mi propio paÃs», declaró Eladany.
Cabe recordar que este elemento fue descubierto por el ingeniero Waynman Dixon, en 1872, durante su exploración del célebre monumento. Posteriormente, la pieza fue donada al centro de estudios, en 1946, donde se perdió.
Además, el fragmento, que según creen los egiptólogos, se usó para la construcción de la pirámide; hace parte de los tres elementos hallados por Dixon dentro de la Gran Pirámide, junto a una bola y a un gancho (almacenados en el Museo Británico de Londres).
Por el momento, debido a las restricciones activas para evitar la propagación del coronavirus, no se ha podido realizar la datación cientÃfica de la pieza de cedro. Sin embargo, los especialistas presumen, en base a un estudio preliminar, que su antigüedad podrÃa remontarse a entre el 3341 y el 3094 a.C.
Esta datación sorprendió a varios expertos, puesto que, de acuerdo con los registros históricos, la icónica pirámide se construyó unos 500 años después.
«Encontrar la reliquia de Dixon que habÃa desaparecido fue una sorpresa, pero la datación por carbono también han sido una gran revelación (…) Muestran que la pirámide es incluso más antigua de lo que habÃamos imaginado», precisó el director de Museos y Colecciones Especiales de la Universidad de Aberdeen, Neil Curtis.
Ante este hecho, Curtis cree que los estudiados debatirán su uso y si existe la posibilidad de que el elemento fuese depositado en el monumento deliberadamente.
«Este descubrimiento ciertamente reavivará el interés en las reliquias de Dixon y cómo estas pueden arrojar luz sobre la Gran Pirámide», concluyó.