Hallaron flores que poseen 99 millones de años de antigüedad

Un grupo de especialistas descubrió dos flores ancestrales, conservadas en trozos de ámbar, que poseen unos 99 millones de años de antigüedad.

Tras el hallazgo, los expertos detallaron que una de las plantas fue bautizada bajo el nombre de Eophylica priscatellata, mientras que la otra fue denominada Phylica piloburmensis.

De igual forma, indicaron que ambas flores, que surgieron en lo que hoy es Myanmar, pertenecen al mismo género que las flores de Phylica nativas de Sudáfrica.

Por su parte, los investigadores consideraron que este hallazgo podría ayudar en los estudios relacionados a cómo evolucionaron las plantas con flor, algo considerado por muchos un «misterio abominable».

«Estas flores concretas son casi idénticas a sus parientes modernos (…) Realmente no hay grandes diferencias», comentó el autor del estudio, Robert Spicer.

Cabe recordar que, de acuerdo a las teorías evolutivas, el desarrollo y la propagación de las plantas con flores (angiospermas) han tenido un protagonismo esencial en la configuración de la vida que conocemos hoy, puesto que provocó la diversificación de los insectos, los anfibios, los mamíferos y las aves.

«Las plantas con flores se reproducen más rápidamente que otras plantas, tienen mecanismos de reproducción más complejos, una gran variedad de formas florales, por ejemplo, con frecuencia en estrecha ‘colaboración’ con los polinizadores (…) Esto impulsa la coevolución mutua de muchos linajes de plantas y animales, dando forma a los ecosistemas», agregó Spicer.

En cuanto al misterio relacionado a la evolución de las plantas, el conocedor precisó que los especímenes encontrados presentan rasgos idénticos a los observados en flores de zonas propensas al fuego.

«Si muchas de las primeras flores estaban expuestas a los incendios en esos paisajes semiáridos, se explica por qué las primeras fases de la evolución de las angiospermas están tan poco representadas en el registro fósil: los fósiles no se forman normalmente en esos entornos semisecos», agregó.

Asimismo, destacó que en la antigüedad, el fuego seguramente fue un factor determinante durante mucho tiempo, lo que permitió que las matas evolucionaran para adaptarse a las condiciones y que sus semillas encontraran su camino a la superficie.

Sin embargo, Spicer recalcó que aún no está claro cuándo surgieron exactamente las plantas con flores, pero considera que dicho descubrimiento podría ayudar a esclarecer el misterio.