por: Jonás Rodríguez
06/02/2021 | 1:00 pm
Pixabay
El aceite de coco es un elemento que, a pesar de usarse popularmente en múltiples tratamientos estéticos caseros, también es utilizado en el área gastronómica, razón por la cual se ha convertido en un producto de primera necesidad para muchas personas.
Sin embargo, cierta parte de la población afirma que, debido a que se produce a partir de grasas saturadas, el artículo podría generar más contraindicaciones que beneficios.
Para verificar o no esta teoría, son muchos los investigadores que se han propuesto la tarea de analizar los componentes del elemento y determinar sus cualidades dañinas o beneficiosas.
En este sentido, la especialista alemana, Karen Michels, afirmó, en representación de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Harvard, que según un estudio realizado en 2018, este alimento es una especie de «veneno».
Para comprobar esto, el doctor Michael Mosley analizó a un grupo de personas que consumió 50 gramos de aceite de coco por 30 días y lo comparó con otra banda de individuos que ingirió la misma cantidad de mantequilla por el mismo tiempo.
De acuerdo con los resultados del proyecto, el colesterol malo (o LDL) aumentó hasta un 15% en las personas que consumieron el aceite, 5% menos que en los individuos que ingirieron la mantequilla. Además, los datos también detectaron un aumento del colesterol bueno, hecho que causó confusión entre los investigadores.
Ante estas revelaciones, los especialistas recomiendan limitar o evitar el consumo del elemento y aprovecharlo en tratamientos estéticos, donde resalta por su versatilidad de beneficios y usos.