por: Edgar Pilca
14/06/2024 | 5:30 pm
Cuepomente
Una nueva amenaza se cierne sobre la salud sexual: el hongo Trichophyton mentagrophytes tipo VII (TMVII) irrumpió en el escenario de las Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS), encendiendo las alarmas entre las autoridades sanitarias de Estados Unidos.
Esta cepa fúngica, que causa una infección de la piel similar a la tiña, se caracteriza por su transmisión sexual, un rasgo que la diferencia de otras infecciones por hongos y la convierte en motivo de especial preocupación.
De acuerdo con los reportes, los síntomas del TMVII pueden pasar desapercibidos al confundirse con otras afecciones dermatológicas.
Manchas rojas, escamosas y con picazón en genitales, nalgas y extremidades son las señales que alertan de su presencia. Sin embargo, esta discreción dificulta su diagnóstico y aumenta el riesgo de contagio.
La alta contagiosidad del TMVII, sumada a la posible resistencia a los antimicóticos habituales, puso en alerta a los expertos. El primer caso reportado en Estados Unidos en junio de ese año, encendió las alarmas.
Las autoridades sanitarias se encuentran investigando a fondo la ETS, los modos de transmisión y los mejores tratamientos para atacarla.