Los perros podrían impulsar el beneficio de nuestro cerebro

Se dice que los perros son los mejores amigos del hombre, y, una nueva investigación comprobó que estos podrían beneficiar a nuestro cerebro.

En el experimento se investigó el impacto que tiene el contacto entre perro y humano en la corteza prefrontal del cerebro, revelando resultados que podrían mejorar en un futuro los tratamientos de terapia asistida por animales.

Esta corteza juega un papel importante ya que ayuda a regular y procesar las interacciones sociales y emocionales como la atención, la retención de la memoria, el estrés, la depresión y la resolución de problemas.

Los científicos investigaron cómo funcionaría esa parte del cerebro al momento de acariciar a un perro, siendo este gesto uno de los más comunes en las terapias asistidas de los animales.

Asimismo, señalaron que decidieron comenzar este estudio «porque se sabe poco sobre la reacción del cerebro al interactuar con animales»; para ello se analizó la corteza frontal de 21 voluntarios a la hora de interactuar con un can o un león de peluche, usando un gorro con sensores que generaban una neuroimagen infrarroja (escáner cerebral portátil), para medir la actividad cerebral mediante la saturación de oxígeno de la sangre en este órgano.

Para dicho análisis cada participante estuvo en seis sesiones, tres contaban con perros de raza Jack Russell terrier, Golden Retriever y Goldendoodle, mientras que los otros tres con el león de peluche.

En las sesiones con el animal de peluche los expertos colocaron el león en el regazo de los involucrados para que interactuaran con él, y en las otras ubicaron a un perro cerca de la pierna permitiéndoles acariciarlos.

Los resultados arrojaron que, al momento de interactuar con el peluche o el perro real, aumentó la actividad cerebral en la corteza prefrontal, expresando que “nuestros resultados confirman estudios previos que vinculan el contacto más cercano con animales o el control de estímulos con una mayor activación cerebral�.

Otro hallazgo fue que los participantes experimentaron una mayor actividad cuando mimaban al perro que cuando tocaban al león de peluche, lo que significó para los científicos que esta acción podría vincularse con la relación entre los seres vivos.

No obstante, los autores no pudieron determinar con exactitud por qué la actividad cerebral aumentó mientras acariciaban al perro, por lo que indicaron que “nuestra explicación es que el participante estableció un vínculo con el perro�, ya que recibieron señales no verbales positivas e interacciones recíprocas por parte del animal vivo.

Anteriormente, algunos expertos habían revelado que los animales pueden mejorar la atención en los humanos.

“Creemos que la participación emocional podría ser un mecanismo subyacente central de la activación cerebral en las interacciones entre humanos y animales�, explicaron los investigadores.

Debido a que los perros se han utilizado en entornos médicos como lo es la terapia asistida, estos podrían ser relevantes para la terapia en pacientes con déficits en la motivación, la atención y el funcionamiento socioemocional.

Sin embargo, antes de que esto se ejecute se deberá realizar algunas investigaciones para confirmar su efecto, y analizar si las personas se benefician de un mayor compromiso emocional y atención al acariciar a los cachorros, o si solo se aplica a los individuos a los que ya les gustan los perros.