por: Yorman Sarmiento
01/03/2023 | 6:00 pm
BBC
Varias investigaciones científicas han comenzado a analizar una de las redes que permiten que funcione el cuerpo humano, y que era totalmente desconocida; se trata de la red bioléctrica, la cual algunos expertos han denominado “electroma».
Según Sally Adee, experta en esta área y autora del libro «Somos eléctricos», dijo que “así como las señales eléctricas sustentan las redes de comunicación del mundo, estamos descubriendo que hacen lo mismo en nuestros cuerpos: la bioelectricidad es la forma en que nuestras células se comunican entre sí».
Para entender este tipo de concepto, es necesario comprender que, en los últimos años, varias investigaciones se han enfocado en estudiar tres sistemas claveS del cuerpo: genoma, proteoma y microbioma.
En el caso del primero, se trata de la secuencia de ADN que hace parte de cada organismo, allí se encuentra la información genética; mientras tanto, el segundo término se refiere al conjunto de proteínas que forman los genes, a estos se les llama “ladrillos esenciales”; finalmente, el tercero es un ecosistema de microorganismos que residen en el cuerpo humano, los cuales son de vital importancia para la salud.
A dichas secuencias, ahora los investigadores, entre ellos Adee, han querido incluir el “electroma. Según la experta entender como es el proceso bioeléctrico del cuerpo ayudaría a saber “cómo arreglarlo cuando algo sale mal ya sea por trauma, defectos de nacimiento o cáncer».
Por su parte, Mustafa Djamgoz, docente en Biología del Cáncer en el Imperial College de Londres, ya comenzó a aplicar la bioelectricidad para tratar la enfermedad.
«Todos los elementos que tenemos en nuestro cuerpo, por ejemplo, el sodio, el potasio, el calcio, el magnesio y el zinc, atraviesan una reacción química que hace que se separen sus átomos, formando lo que se conoce como iones, que son partículas con carga eléctrica», señaló Djamgoz
Asimismo, el integrante del Imperial College asegura que los fluidos del cuerpo están llenos de iones, por lo tanto, los de carga opuesta se atraen y aquellos que poseen la misma se rechazan, así que al circular por el cuerpo producen corriente, al cual es de apenas 70 milivoltios, una cantidad mínima si se compara con una pila AA, que comúnmente tiene 1.500 milivoltios.
De igual manera, el experto comentó que las personas disponen de 22 mil genes, los cuales poseen una composición genética distinta, sin embargo, en el caso de la bioelectricidad, existe una sola ley fundamental que es aplicable en todos los casos.
Finalmente, Djamgoz está aplicando la bioelectricidad para frenar el avance del cáncer, al usar un tratamiento que se vincula con la forma en que se transmiten las señales eléctricas dentro del cuerpo.