Tres ideas sencillas para jugar con los niños en casa

Los niños necesitan jugar para comenzar a desarrollar sus habilidades físicas y mentales, sin embargo, para algunos adultos, es bastante difícil compartir con ellos un momento de esparcimiento y recreación, debido a las ocupaciones por el trabajo.

No obstante, existen tres actividades súper sencillas que puedes hacer con tu hijo en casa y sin hacer grandes inversiones en juegos.

Dichas actividades son recomendadas por María Montessori, una pediatra y profesora italiana que plantea una forma diferente para educar a los pequeños a través de juegos muy particulares. Estos son algunos de ellos, según la edad de cada infante:

El juego de los calcetines para niños de dos a cinco años

Es una actividad que le permitirá a tu hijo generar confianza en sí mismo, además de empatía y autonomía, consiste en que el niño empareje los calcetines según el color, la textura, el diseño y el tamaño de la prenda.

Para completar el juego, deberás indicarle cómo se guarda y en qué lugar, lo cual hará que te ayude en las labores del hogar de manera divertida.

El juego de la pizarra de arena para niños de tres años

Se trata de una alternativa de juego muy peculiar. Para completarla, primero debes colocar en una bandeja o tapa de caja de zapatos una cantidad suficiente de arena liviana o harina de trigo, en el fondo, tendrás que disponer de una cartulina de color oscuro.

Una vez esté todo listo, proponle al pequeño que copie los números o letras en la arena usando su dedo índice y medio juntos, también puede crear figuras que sean de su agrado, esta es una manera diferente de comenzar a desarrollar su proceso de preescritura.

El juego de joyería con pasta para niños de dos a seis años

Es uno de los juegos preferidos por muchos niños, consiste en seleccionar fideos crudos que tengan orificios, tales como macarrones o anillos, para que después el niño comience a insertar una cuerda de hilo o lana por el centro de cada pieza, con la intención de fabricar una especie de cadena.

La actividad permitirá que tu hijo desarrolle habilidades de tipo motoras finas, sensoriales y hasta matemáticas.

Jugar con los niños ayudará a que ellos tengan múltiples beneficios como mejorar el humor, disminuir las rabietas; además, contribuye con el desarrollo de la autoestima, el sentido de pertenencia y hacen que se sientan felices.