por: Edgar Pilca
21/08/2025 | 7:30 pm
National Cancer Institute en Pexels
Un nuevo estudio publicado en la revista Nature Medicine encendió una luz de esperanza en la lucha contra algunos de los cánceres más agresivos.
Una vacuna experimental, desarrollada por investigadores del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), ha demostrado ser prometedora en la prevención de la recurrencia del cáncer de páncreas y colorrectal, incluso después de que los pacientes han sido sometidos a tratamientos convencionales como quimioterapia y cirugía.
El éxito de esta nueva estrategia reside en su capacidad para atacar las mutaciones del gen KRAS. Estas mutaciones están presentes en una gran proporción de tumores humanos, afectando a casi el 90% de los cánceres de páncreas y el 40% de los colorrectales.
Durante mucho tiempo, se consideró que estas mutaciones eran inalcanzables con fármacos e inmunoterapias, lo que representaba un gran desafío para la ciencia médica. El reto ha sido, hasta ahora, lograr que el sistema inmunológico del paciente reaccionara contra ellas.
La vacuna actúa entrenando al sistema inmune para que detecte estas mutaciones y las ataque, previniendo así que los restos de la enfermedad se desarrollen nuevamente en el cuerpo.
El estudio, un ensayo clínico de fase 1, incluyó a 25 personas (20 con cáncer de páncreas y cinco con cáncer colorrectal) que presentaban un alto riesgo de recaída.
A pesar de haber completado sus tratamientos estándar, todavía tenían restos de la enfermedad detectables en sus análisis de sangre.
Los investigadores confirmaron que la vacuna es efectiva para entrenar el sistema inmunológico de los pacientes y, hasta el momento, no ha presentado efectos secundarios amenazantes.