por: Inés Reyes
03/01/2018 | 5:01 pm
Pixabay - Imagen referencial
Al menos 3 mil 954 personas fueron asesinadas en 2017 en El Salvador, y a pesar de que la situación mejoró respecto del año anterior la nación centroamericana aún es una de las más violentas del mundo.
El director de la Policía Nacional Civil, Howard Cotto, informó en conferencia de prensa este miércoles que el año pasado hubo un promedio de 60,8 muertes violentas por cada 100 mil habitantes; el equivalente a 10,8 por día, lo que implica una reducción desde los 5 mil 280 homicidios perpetrados en 2016.
Destacó, que el avance en el combate a la delincuencia mejoró con el cambio de estrategia de las autoridades de seguridad pública y la implementación de una serie de medidas extraordinarias que afectaron al sistema penitenciario.
Asimismo, mencionó que estos hechos permitieron aislar en prisión a los cabecillas de las pandillas, a quienes se responsabiliza de la mayoría de los crímenes que se cometen en el país.
Destacó, que en 36 de los 262 municipios del país no se registraron homicidios y en 134 hubo menos de uno al día.
Por ello el experto advirtió que el gobierno debe poner más atención a los 92 municipios más violentos del país, “revisar los planes y estrategias de seguridad y si es necesario hacer una recomposición de los mismos”.
Pese al avance, señaló que se mantiene la percepción de inseguridad entre la población.
“Todas las encuestas de opinión manifiestan que la inseguridad, el crimen, el delito y las pandillas son el principal problema de los salvadoreños”, explicó Cotto.
En El Salvador, las maras o pandillas están integradas por más de 67 mil jóvenes y adultos. Se encuentran en barrios y comunidades populosas y según las autoridades están involucradas en el narcotráfico, la extorsión y el crimen organizado.