por: Josmeily Yzquiel
12/09/2024 | 7:30 am
La Razón
Este jueves, 12 de septiembre, se celebra el Día Internacional de Acción contra la Migraña, con la finalidad de sensibilizar a la población sobre el dolor que sufren los afectados por este tipo de cefaleas y así mejorar la calidad de vida.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la migraña afecta al 14% de la población mundial, catalogándola entre las 20 enfermedades más incapacitantes en todo el mundo.
La migraña se caracteriza por la aparición constante de dolores de cabeza pulsantes, ésta varía en intensidad, duración y frecuencia en un lado de la cabeza habitualmente.
Esta patología puede ser hereditaria y se manifiesta en cualquier edad, generalmente entre los 20 y 50 años de edad. Sin embargo, frecuenta más en las mujeres que en los hombres.
La razón de que estas jaquecas ocurran es debido a que las células nerviosas del cerebro generan actividad eléctrica intensa, afectando la vista, el equilibrio, la coordinación muscular, la sensibilidad y el lenguaje.
A su vez, esto se produce por el estímulo del quinto par craneal que libera sustancias, la cual provoca inflamación en los vasos sanguíneos cerebrales y las capas de tejido que cubren el cerebro.
En los tipos de esta enfermedad, se clasifica primeramente la migraña con aura, que viene acompañada de visión borrosa, visión de manchas negras que se mueven e incluso hormigueo en manos o en comisuras labiales y lengua, las cuales pueden durar de cinco a 20 minutos.
En segundo lugar se encuentra la migraña sin aura o común, que presenta síntomas como visión borrosa, náuseas o estrés; ésta puede variar desde unas horas hasta días, dependiendo de cada persona.
Además, las causas varían entre cambios hormonales ocasionadas por píldoras anticonceptivas o al ciclo menstrual en las mujeres, ansiedad, alteración de los patrones del sueño, consumo de alcohol, sensibilidad a ruidos fuertes y a luces brillantes, o por el tabaco.
Este padecimiento no tiene cura, sin embargo se puede tratar y controlar mediante fármacos establecidos por los médicos para aliviar el dolor y reducir su frecuencia.