por: Yesimar Gerdler
21/05/2024 | 7:30 am
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Este martes, 21 de mayo, se cumplen 69 años del fallecimiento del poeta, escritor, abogado, humorista y político venezolano, Andrés Eloy Blanco, miembro de la Generación del 28 y fundador del partido Acción Democrática (AD).
Blanco nació en Cumaná, estado Sucre, el 06 de agosto de 1896. Estudió en Caracas, donde se incorporó al Círculo de Bellas Artes en 1913.
Ingresó a la Universidad Central de Venezuela (UCV), donde cursó la carrera de Derecho y se graduó en 1919. Ejerció su profesión de abogado por un tiempo en el estado Apure.
Desde muy joven mostró un gran talento literario, el cual fue reconocido en diversos concursos. Uno de sus primeros poemas «La espiga y el arado», fue premiado en los Juegos Florales de Ciudad Bolívar en 1916.
En 1921, publicó su primer libro «Tierras que me oyeron»; y en 1923, recibió el primer premio en un concurso promovido por la Real Academia Española de la Lengua, en la ciudad de Santander (España), a la cual concurrió con su «Canto a España», lo que le otorgó notoriedad internacional.
En 1924 fue nombrado miembro de la Real Academia Sevillana de Buenas Letras. Ese mismo año visitó La Habana (Cuba), donde se reunió con intelectuales cubanos y venezolanos exiliados.
En 1928, formó parte del grupo de estudiantes universitarios que se alzaron en contra de la dictadura del general Juan Vicente Gómez. Por tal motivo fue hecho prisionero y confinado en Puerto Cabello hasta 1932, cuando fue liberado por motivos de salud.
En el Castillo de San Felipe de Puerto Cabello, convertido en prisión y a fines del siglo XIX rebautizado con el nombre de Libertador, fue donde escribió «Barco de Piedra» en 1937.
Al ser liberado se le prohibió realizar cualquier tipo de manifestación pública, por lo cual se dedicó nuevamente a las letras, publicando «Poda» en 1934, con poemas tan conocidos como «Las uvas del tiempo» y «La renuncia».
Otros poemas muy famosos son «Coplas del amor viajero», «Silencio» y «La Hilandera». Un año después, en 1935, publicó «La aeroplana clueca».
A la muerte de Juan Vicente Gómez, el Presidente Eleazar López Contreras le nombró jefe del Servicio de Gabinete en el Ministerio de Obras Públicas. Sin embargo, su postura crítica ante la represión de las protestas del mes de febrero de 1936 lo apartaron del cargo.
Fue transferido a la Inspectoría de Consulados, viajando a Cuba, EE.UU y Canadá, renunciando al cargo en 1937. Fue uno de los fundadores del partido ORVE y después militante del Partido Democrático Nacional (PDN). Asimismo, resultó electo Presidente del Consejo Municipal del Distrito Federal.
Durante el Gobierno de Rómulo Gallegos, se desempeñó como ministro de Relaciones Exteriores y representó a Venezuela en la Asamblea de las Naciones Unidas realizada en París en el año 1948.
Luego del derrocamiento de Gallegos salió al exilio, pasando primero a Cuba y posteriormente a México, donde se dedicó por completo a la poesía.
Entre sus obras destacan: «El alma inquieta», «El río de las siete estrellas», «El limonero del Señor», «El conejo blanco», «El gato verde», «La loca luz Caraballo», «A un año de tu luz», «Canto a los hijos»; y uno de sus poemas más famosos: «Píntame Angelitos Negros», considerado por muchos hispanoamericanos como un himno en contra de la discriminación racial
El poema fue publicado en vida de su autor y fue incluido también en una recopilación póstuma publicada en 1959, titulada «La Juanbimbada», que recoge muchas poesías dispersas de distintas épocas de su vida.
Andrés Eloy Blanco murió tras un accidente automovilístico el 21 de mayo de 1955, en Ciudad de México. Sus restos reposan en el Panteón Nacional desde el 02 de julio de 1981.
En 1973, el Congreso Nacional hizo una edición de sus obras completas en 10 volúmenes, cinco de los cuales recogen su labor periodística, que contiene crónicas y ensayos cortos.