por: Elena Velásquez
28/09/2019 | 9:00 am
@papeliterario
Este sábado, 28 de septiembre, se cumplen 38 años del fallecimiento del polÃtico venezolano, Rómulo Betancourt, Presidente de la República entre 1959 y 1964.
Nacido en Guatire, estado Miranda, el 22 de febrero de 1908, es considerado una de las figuras polÃticas venezolanas más influyentes de su época, al punto que históricamente se le ha llegado a denominar como el «padre de la democracia».
Inició sus estudios superiores en la Facultad de Derecho de la Universidad Central de Venezuela, en el año 1927, sin embargo, un año más tarde, durante la «Semana del Estudiante», comenzó su trayectoria en la polÃtica nacional participando en la primera manifestación en contra del Gobierno de Juan Vicente Gómez, junto a otros lÃderes estudiantiles como Raúl Leoni, Jóvito Villalba, Andrés Eloy Blanco, PÃo Tamayo y otros que conformaron el grupo llamado «Generación del 28».
Las protestas en contra del régimen gomecista le valió la vida en clandestinidad, seguida del encarcelamiento y el exilio; situación que también vivió durante el gobierno de Eleazar López Contreras.
Años más tarde se sumó al golpe de estado con el que se derrocó del poder al entonces Presidente, IsaÃas Medina Angarita, quien se habÃa negado a realizar elecciones presidenciales por considerar que la nación aún no estaba preparada para ello.
Sin embargo, los eventos que sucedieron a este hecho, como la instauración de la Junta Provisional Revolucionaria de Gobierno y la elección de Rómulo Gallegos como nuevo Presidente solo dio paso a un nuevo gobierno autoritario bajo el poder de Marcos Pérez Jiménez.
Fue tras la caÃda del dictador, en 1958, cuando Betancourt retornó al paÃs y postuló su candidatura a la Presidencia de la República con el apoyo del partido polÃtico Acción Democrática (AD); resultando electo el 07 de diciembre con más del 49% de los votos.
Su mandato se caracterizó por los avances a la consolidación democrática de Venezuela, el desarrollo de la industria petrolera, el sector educativo y el sector agrÃcola; asà como la ruptura de relaciones bilaterales con Gobiernos que fuesen considerados ilegÃtimos, dictatoriales u autocráticos.
Al culminar su periodo presidencial decidió retirarse de la vida polÃtica y se dedicó a cultivar la escritura, dejando una serie de obras que versan de historia y desarrollo polÃtico de la nación.
Pasó sus últimos años viviendo de forma paralela entre Caracas y Nueva York, siendo esta última la ciudad en la que falleció a causa de un derrame cerebral, el 28 de septiembre de 1981.