por: Yesimar Gerdler
25/08/2019 | 11:00 am
Actualidad RT
Según informó la agencia AP, la central nuclear japonesa Fukushima-1 se quedará sin espacio en el 2022 para almacenar el agua radioactiva que se acumula en las instalaciones tras el terremoto de 9,0 y el posterior tsunami, registrados en 2011.
Pese a que el líquido contaminado es limpiado, por sus niveles de radioactividad debe ser almacenado en unos tanques especiales.
Desde el desastre, en Fukushima-1 han sido instalados casi mil tanques de este tipo que contienen más de un millón de toneladas de agua.
En el lugar serán colocados más reservorios en los que será posible depositar otros 1,3 millones de agua más, pero, según los expertos, esto solo resolverá el problema hasta el 2022.
A esta situación, se suma el hecho de que en el 2021 los especialistas deben empezar los trabajos para la eliminación del combustible radioactivo de la central y necesitan espacio para el almacenamiento de los desechos peligrosos.
Asimismo, existe riesgo de filtración del agua de los tanques contenedores y como consecuencia de contaminación de la zona, factores por los cuales las autoridades del país están obligadas a buscar formas de resolver la situación.
Entre las soluciones planteadas se encuentra la liberación controlada del agua en el océano Pacífico, idea a la que se oponen los representantes del sector agrícola y pesquero.
Al mismo tiempo, también se evalúan las opciones de la vaporización y de una inyección subterránea, así como la de construir nuevos tanques en un territorio cercano.