por: Zulymar Gutiérrez
14/09/2017 | 10:46 am
AP
Luego de la renuncia del ex-vicepresidente, Raúl Sendic, la ex-Primera dama Lucía Topolansky, asumió el cargo como una hazaña en la historia de la política uruguaya.
Sendic dimitió de su cargo y por unanimidad de los legisladores fue aceptada en la Asamblea General del Parlamento.
Topolansky, de 72 años, esposa del ex-presidente José Mujica, no hizo uso de la palabra en la sesión en la que tampoco hubo debate.
En Uruguay el vicepresidente es el presidente del Senado y de la asamblea general del Parlamento, cargos que ahora desempeñará Topolansky.
Según la Constitución uruguaya, Sendic debía ser sustituido por el primer senador de la lista más votada en las últimas elecciones nacionales, es decir, Mujica.
No obstante, recordemos que el ex-presidente se encuentra inhabilitado, lo que le impide asumir, ademá la reelección está prohibida en Uruguay y en consecuencia no podría suplir al presidente Tabaré Vázquez en caso de necesidad.
Austera y poco preocupada por los formalismos, Topolansky comparte el modo de vida de Mujica, desapegado a lo material.
Sendic había anunciado su renuncia el sábado en el plenario de la coalición oficialista de izquierda, Frente Amplio luego de que el Tribunal de Conducta Política de esa fuerza determinara que había incurrido en un “proceder inaceptable en la utilización de dineros públicos” y lo acusara de mentir en sus explicaciones.
Sendic está siendo acusado de peculado de uso con las tarjetas de la petrolera estatal ANCAP. Se defendió argumentando que el déficit de fondos en la empresa se originó por fuertes inversiones necesarias supuestamente realizadas por la misma.
La petrolera también hizo una campaña publicitaria millonaria en televisión con un eslogan que luego Sendic usó como propio en la campaña electoral. El caso continúa siendo investigado.