por: María Fernanda Pérez
10/11/2025 | 10:30 am
EFE/ Mauricio Dueñas Castañeda
La IV Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y la Unión Europea (UE) concluyó este domingo en la ciudad caribeña de Santa Marta, sellando lo que sus líderes calificaron como «una relación entre iguales» y un compromiso renovado con el diálogo y la cooperación en un complejo panorama global.
El encuentro, aunque reducido a una sola jornada y con una baja asistencia de jefes de Estado, culminó con una robusta Declaración Final de 52 puntos y el lanzamiento de dos alianzas clave: una para la seguridad ciudadana y otra para la economía del cuidado.
De este modo, el presidente del Consejo Europeo, Antonio Costa, destacó que la cumbre envía un «mensaje claro al mundo» sobre la elección de los bloques por el diálogo en lugar de las divisiones.
«Incluso en los momentos de más incertidumbre, Europa, América Latina y el Caribe mantienen una apuesta por el diálogo en lugar de las divisiones, la cooperación y no la confrontación, la asociación en lugar del aislamiento», declaró Costa.
El dirigente europeo hizo hincapié en que la relación Celac-UE se cimenta en «valores, historia y lazos humanos compartidos», así como en una visión mundial que promueve el pleno cumplimiento del derecho internacional.
EFE
La Declaración de Santa Marta abordó un amplio espectro de preocupaciones, desde la lucha contra el narcotráfico y el apoyo al multilateralismo comercial, hasta la necesidad de paz en regiones en conflicto como Gaza y Ucrania.
La cumbre dio origen a dos compromisos específicos: una Alianza para la Seguridad Ciudadana, que fortalecerá la cooperación en la lucha contra el crimen organizado y el tráfico de drogas, y un Pacto por los Cuidados, que impulsará el intercambio de buenas prácticas en la economía del cuidado, un trabajo no remunerado que, según la CEPAL, representa en promedio el 21,3% del Producto Interno Bruto (PIB) en la región latinoamericana.
La declaración final fue respaldada por 58 de los 60 países, con la notable «disociación» de Venezuela y Nicaragua del documento conjunto.
La discusión a puerta cerrada estuvo marcada por una crítica tácita, pero contundente, a las recientes operaciones antidrogas de Estados Unidos en el Caribe y el Pacífico.
Asimismo, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, advirtió que la «amenaza de uso de la fuerza militar volvió a formar parte del cotidiano» en la región, una postura compartida por el anfitrión, Gustavo Petro, y el presidente español, Pedro Sánchez, quien instó a reforzar la unidad Celac-UE en defensa del derecho internacional.