por: Jonás Rodríguez
01/10/2021 | 5:00 pm
Pixabay/ Referencial
Durante su intervención ante las autoridades de las Naciones Unidas, el Monseñor Paul Gallagher, quien se desempeña como Secretario para las Relaciones con los Estados dentro de la Secretaría de Estado de la Santa Sede, denunció que muchos migrantes sufren de racismo y xenofobia fuera de sus fronteras.
«Muchos migrantes se enfrentan al racismo y la xenofobia en su país de destino en lugar de recibir el apoyo que necesitan», alertó.
De igual forma, el diplomático del Vaticano criticó la eugenesia como una forma de discriminación, actividad que catalogó como «insidiosa».
En relación a ello, declaró que violar los derechos de estos seres humanos «por motivos de discapacidad, sexo u otras características consagra principios de discriminación totalmente opuestos a los valores afirmados en la Declaración de Durban».
Asimismo, el delegado indicó que la Santa Sede está comprometida con la lucha contra el racismo y la discriminación, sin embargo, destacó que el combate contra estos fenómenos no debe «servir de justificación para que los Estados violen los derechos humanos de las minorías o censuren sus opiniones».
En este sentido, declaró que, según su criterio, la solución está en la coordinación de una «cultura de encuentro, fraternidad y solidaridad».
Por otra parte, el católico denunció que la comunidad cristiana es actualmente, «el grupo más perseguido del mundo». Además, subrayó que la falta de respeto a los derechos de libertad de religión y creencias ha sido el detonante para la violación de otros derechos fundamentales.