por: Zulymar Gutiérrez
12/04/2017 | 10:12 am
Televen
Hoy Miércoles Santo la Basílica de Santa Teresa recibirá a más de trescientos cincuenta mil devotos del Nazareno de San Pablo para acompañarlo en la procesión que se acostumbra cada año.
Las misas se iniciaron a las doce de la madrugada de hoy y durante todo el día se estarán celebrando eucaristías a cada hora. A las doce del día el Arzobispo Cardenal Jorge Urosa Savino oficiará la misa central.
Este año la procesión del Nazareno de San Pablo saldrá con una hora y media de anticipación respecto al año anterior debido a la extensión que se le hizo al recorrido, se conoce que arribará a la avenida Bolívar, seguido de la avenida Universidad hasta El Calvario, de allí a la plaza O’Leary y luego la avenida Lecuna para retornar a la Basílica de Santa Teresa, después de recorrer más de veinte cuadras del centro de Caracas.
A los feligreses se les recomienda:
Los actos dentro de la Basílica culminarán a las tres de la tarde, hora en la que saldrá la procesión.
La jefa de Gobierno del Distrito Capital, Carolina Cestari, anunció que fueron desplegados funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), Bomberos del Distrito Capital quienes han instalado en el ala sur de la Basílica una carpa donde ofrecerán resguardo a los feligreses que presenten inconvenientes durante el acompañamiento al venerable.
Historia la imagen milagrosa «Nazareno de San Pablo»
La imagen de El Nazareno está hecha de madera y representa a Jesucristo cargando la Cruz. El nombre de esta imagen tiene su génesis tras haber llegado a Caracas y ser llevada en principio a la capilla de San Pablo. Luego de haber permanecido en ella por casi un siglo, el Presidente Antonio Guzmán Blanco, ordenó derribar la capilla y en su lugar levantar el Teatro Municipal, tiempo más tarde fue construida la Basílica de Santa Teresa lugar donde fue trasladada la imagen y hasta ahora se mantiene.
En el año 1587, una epidemia de vómito negro azotó a la ciudad. Los fieles, decidieron sacar en procesión a la imagen. Al pasar cerca de un árbol de limones, la corona de espinas quedó retenida, cayendo algunos frutos al suelo. Los devotos decidieron usarlos como medicina milagrosa que acabó con la peste.