por: Inés Reyes
16/09/2017 | 10:15 am
Pixabay - Imagen referencial
Las acciones cotidianas pueden resultar imperceptibles como perjudiciales para la salud pero no nos damos cuenta que las actividades diarias generan daños debido a notarlo como una costumbre, eso evita alcanzar la felicidad.
Existen muchos factores que podrían afectar al organismo así como también tu estado de ánimo. Sin embargo, toma nota de estas recomendaciones para que obtengas una solución y mejor calidad de vida.
De acuerdo a un estudio publicado en el Journal of Behavior Therapy and Experimental Psychiatry, caminar con los hombros bajos, la espalda curva y pequeños movimientos en los brazos no siempre es señal de decaimiento: puede directamente generarlo. Por el contrario, caminar con paso seguro y la cabeza erguida podría favorecer un mejor ánimo.
La facilidad de fotografiar, filmar, grabar audios, y escuchar música condiciona la manera en que disfrutamos de cada momento y en cómo los recordamos.
Así lo señala un estudio publicado en la revista Psychological Science, llevado a cabo con un grupo de personas que visitaron un museo.
De acuerdo a lo registrado, los objetos que más dificultades tuvieron los participantes para recordar fueron precisamente aquellos que fotografiaron, en relación con los que solo vieron.
Seguramente ya hayas escuchado que la actividad física no solo le hace bien a tu cuerpo, sino también a tu mente. Un estudio publicado en JAMA Psychiatry lo comprueba.
De acuerdo a éste, hacer actividad física 3 veces por semana disminuye un 19% el riesgo de padecer de depresión.
Los vínculos pueden nutrirte y hacerte feliz, o generarte de forma continua ansiedad o depresión. Aunque a menudo es difícil distinguir qué tipo de vínculos son lo que pueden estar afectándote, una vez que logras alejarte de ellos o trabajarlos a nivel psicológico percibirás que el bloqueo que te generaban ya no existe.
El famoso «multitasking» aparece como una de las habilidades más valoradas del mercado de trabajo, no siempre es la mejor opción. Aunque creemos que estamos siendo «más productivos», pequeños hábitos como comer delante de la computadora pueden aumentar el estrés y alejarnos de nuestro entorno.
Dormir es tan necesario como alimentarse. El sueño es el mecanismo que nuestro cuerpo tiene para regenerarse; por eso un mal descanso puede afectar tanto las funciones físicas como las emocionales.
Existen muchos estudios que revelan los beneficios que la risa genera en nuestra salud. Ésta es una de las mejores medicinas para la ansiedad, la depresión y el estrés.
Pasar tiempo con amigos, con la pareja o con la familia puede ser la respuesta sencilla a darle espacio a la risa dentro de tu día a día.
Así como es importante pasar tiempo con quienes más queremos y desarrollar vínculos de calidad, también es vital tener un espacio de intimidad para que luego el encuentro con el otro sea mucho mejor.