por: Inés Reyes
06/07/2017 | 3:59 pm
AP
Las esperanzas del Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de que China ayude con la contención de Corea del Norte al parecer se han ido perdiendo tras distanciarse Washington de Beijing.
China no ha respondido ante la presión de Estados Unidos que busca contrarrestar las acciones de Corea del Norte. Sin embargo, para Beijing el reciente lanzamiento del misil intercontinental de Corea del Norte no hizo mucho ruido comparado con la ansiedad que se disparó en Washington.
El profesor de la Universidad de Yonsei en Seúl, John Dalury, señaló que han habido «muchas ilusiones» por parte de Estados Unidos de que China se acerque a su enfoque.
También, aclaró que «Trump pensó que había encontrado un aliado en el Presidente chino Xi Jinping luego de su reunión en abril (…) Sin embargo, Corea del Norte continuó con sus pruebas de misiles y China siguió manteniendo los canales económicos abiertos e incluso los amplió», sostuvo Dalury.
Ante estas declaraciones, Trump, manifestó: “Tal vez si China tomara una gran medida hacia Corea del Norte terminara con esta tontería de una vez por todas”, dijo el mandatario estadounidense.
La embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, Nikki Haley, aseveró que el comercio entre China y el país norteamericano podría ponerse en riesgo si el país asiático no coopera.
Haley, citó que gran parte de la carga para hacer cumplir las sanciones de las Naciones Unidas recae en China, quien es el responsable del 90% del comercio con Corea del Norte.
El Presidente chino Xi respondió en una llamada con Trump que algunos factores negativos estaban «perjudicando» la relación entre ambos países.
China sigue siendo un aliado confiable para Corea del Norte. En este sentido, que su país vea pocas razones para actuar en contra de Corea del Norte nace también de su preocupación de que los acontecimientos en la península coreana están eclipsando otros aspectos de la relación con Estados Unidos.