por: Yarelis Borges
05/01/2017 | 5:20 pm
Pixabay
El bótox es una toxina butolínica y neurotoxina que se obtiene de una bacteria, funciona para el tratamiento de patologías neurológicas y también es utilizada para fines estéticos.
Esta toxina es una de las terapias más utilizadas para la corregir las arrugas en el rostro, aunque si se utiliza exageradamente se puedes obtener resultados pocos favorables.
La toxina botulínica produce una relajación muscular temporal cuando bloquea la liberación de acetilcolina y no causa ninguna lesión física ni en las estructuras nerviosas ni musculares.
Si bien está permitido utilizar bótox con finalidad estética, hay que entender que puede tener efectos secundarios que deben conocerse, estos suelen ser dolor local en el punto donde se inyectó, hinchazón, enrojecimiento de la piel, morados y debilidad muscular excesiva. Los efectos comienzan a notarse a las 48 horas de aplicada la toxina.