por: María Fernanda Pérez
08/11/2023 | 8:00 am
Actualidad RT
La empresa finlandesa Metroc encontró una nueva fuente de mano de obra para entrenar su modelo de lenguaje basado en inteligencia artificial: los presos.
Según medios de tecnología, la empresa está utilizando reos para etiquetar datos y ayudar a sus modelos a entender pistas de artículos de prensa y documentos municipales sobre próximos proyectos de construcción.
Asimismo, esta IA tiene que ser capaz de distinguir entre un proyecto de hospital que ya ha contratado a un arquitecto o a un instalador de ventanas, por ejemplo, y proyectos que aún podrían estar contratándose.
De este modo, los privados de libertad trabajan en turnos de tres horas por los que se les paga 1,54 euros (1,67 dólares) la hora.
Así, la empresa consigue trabajadores que hablan finés, mientras el sistema carcelario ofrece a los reclusos un empleo que quizá les prepara para el mundo digital del trabajo tras su puesta en libertad.
Sin embargo, el uso de presos para entrenar la IA ha generado controversia y ha sido criticado por algunos como una forma de explotación laboral, pero la compañía defiende su práctica argumentando que los presos son «libres de elegir si quieren trabajar o no» y que el trabajo les da una oportunidad para aprender habilidades valiosas.