Expertos alertaron riesgos de la superinteligencia artificial

Expertos opinan que la creación de sistemas de inteligencia artificial superinteligentes con capacidades que superen a las de la inteligencia artificial general, es solo “cuestión de tiempo� y que incluso podría significar “un riesgo existencial.�

Dicha declaración fue emitida por los cofundadores de OpenAI el pasado 22 de mayo y alertaron sobre la importancia de que la humanidad “actúe�, para así lograr mitigar futuros desafíos.

«Tal y como vemos el panorama ahora, es concebible que en los próximos diez años los sistemas de IA superen el nivel de los expertos en la mayoría de los ámbitos y lleven a cabo tanta actividad productiva como una de las corporaciones más grandes de la actualidad», comentaron en una publicación hecha en el blog de la empresa Sam Altman, Greg Brockman e Ilyá Sutskever.

De este modo, los creadores del popular chatbot ChatGPT, resaltaron que “la superinteligencia será más poderosa que otras tecnologías a las que la humanidad ha tenido que enfrentarse en el pasado.»

“Además de ofrecernos un futuro mucho más próspero, tiene también un potencial inmensurablemente destructivo. (…) La energía nuclear comúnmente se utiliza como un ejemplo histórico de una tecnología con esta propiedad, la biología sintética es otro ejemplo», indicaron.

Asimismo, expresaron que los sistemas que generan preocupación tendrán la potencia más allá de cualquier tecnología creada hasta el momento y que detener la creación de la superinteligencia sería «arriesgado y difícil».

“Porque ya es una parte intrínseca del desarrollo tecnológico en curso, y pararlo requeriría algo así como un régimen de vigilancia global y ni siquiera hay garantías de que esto funcione», manifestaron.

En este sentido, una de sus propuestas es coordinar esfuerzos entre los principales desarrolladores de inteligencia artificial en pro de garantizar la seguridad de las nuevas tecnologías, especialmente cuando se habla de aquellas que igualen o excedan a las del cerebro humano.

Además, plantearon crear un ente regulador internacional para la mencionada industria, similar al Organismo Internacional de Energía Atómica (Oiea), que ayude a disminuir el riesgo existencial para la humanidad.