Tribunal en Estados Unidos falló a favor de Venezuela en caso Bandagro

Venezuela ganó en el caso Bandagro, tras más de 10 años de juicio en Ohio, Estados Unidos, informó la Procuraduría General de la República en nota de prensa.

El Caso Bandrago (que deriva del nombre del extinto Banco de Desarrollo Agropecuario) se remonta a los años 80, cuando unos estafadores internacionales falsificaron notas promisorias de la entidad bancaria por cientos de millones de dólares e intentaron usarlas o efectuar su cobro en varios lugares del mundo.

El caso fue iniciado en Ohio en 2004 por Skye Ventures, una empresa de los Estados Unidos que obtuvo dos de las fraudulentas notas promisorias supuestamente emitidas por Bandagro, y demandó un monto de 100 millones de dólares más intereses.

«En la decisión, el juez declaró la falsedad de las notas y dejó claro que ninguna acción de la República o sus funcionarios puede llegar a considerarse como una validación de esas notas», indica la nota de prensa.

La representación de la República Bolivariana de Venezuela fue ejercida por la PGR, con el apoyo del escritorio jurídico Foley Hoag.

Este caso se originó con la denuncia hecha el 22 de septiembre de 1993, por la entonces presidenta del Fondo de Garantías de Depósitos y Protección Bancaria (Fogade), Esperanza Martinó de Fernández, quien señaló que con motivo de la intervención de Bandagro, hecha por Fogade, recibieron información de los bancos Principal, Bank of América y Progreso, sobre la existencia de unas notas promisorias emitidas en 1981 por el banco intervenido, refiere el Correo del Orinoco.

Sin embargo, luego de exhaustivas investigaciones desarrolladas por el Estado, a través de la PGR, tanto en Venezuela como en el exterior; las experticias de rigor y del juicio oral y público quedó determinado, conforme a los órganos de prueba que fueron evacuados, que las falsas notas promisorias del extinto Bandagro, carecen total y absolutamente de validez, por cuanto falsificadas con deliberada intención delictiva.

Además los exdirectivos de la referida institución financiera, los testigos y un cúmulo de pruebas adicionales, negaron en el transcurso del proceso, rotunda y categóricamente haber suscrito las referidas notas promisorias.

Por otro lado, experticias grafotécnicas y deposiciones de expertos que comparecieron a las diferentes audiencias, ratificaron que los documentos, firmas, sellos y membrete, fueron forjados; toda vez que se demostró que Bandagro jamás emitió pagaré alguno.