por: Edgar Pilca
08/04/2024 | 6:00 pm
Noveno Ce
El microcemento es un revestimiento decorativo considerado de última generación, que está compuesto por cemento, resinas, aditivos y pigmentos minerales.
Se puede aplicar tanto en paredes como en suelos, tanto en interior como en exterior, creando una superficie continua sin juntas ni divisiones. Su espesor es de solo 2 a 3 mm, lo que lo convierte en una opción ideal para renovar superficies existentes sin necesidad de realizar grandes obras.
Aunque en los últimos años se ha puesto de moda, realmente el mismo data desde hace muchos años atrás y guarda una serie de curiosidades que seguro desconocías.
Origen histórico
Aunque hoy en día se asocia con la modernidad, el microcemento tiene sus raíces en la antigua Roma. Los romanos usaban un material similar llamado «opus signinum» para revestir sus suelos y paredes.
Aplicaciones
Además de su uso habitual en paredes y suelos, el microcemento se ha utilizado en aplicaciones más creativas como: revestimiento de muebles, creación de esculturas y objetos decorativos, revestimiento de piscinas, aplicación en fachadas y restauración de estructuras antiguas.
Propiedades antibacterianas
El microcemento tiene propiedades antibacterianas y fungicidas, lo que lo hace ideal para entornos donde la higiene es importante, como hospitales y clínicas.
Gama de colores
Aunque se suele asociar con colores neutros como el gris y el blanco, el microcemento se puede pigmentar en una amplia gama de colores, lo que permite personalizar el espacio según tus preferencias.
Sostenibilidad
Es un material respetuoso con el medio ambiente, ya que se fabrica con materiales reciclados y de bajo contenido en COV (compuestos orgánicos volátiles).
Durabilidad
El microcemento es un material muy resistente al desgaste, lo que significa que puede durar muchos años con un mantenimiento mínimo.
Sensación de amplitud
El microcemento, al ser un material continuo sin juntas, crea una sensación de amplitud en las estancias.