por: Yorman Sarmiento
31/01/2023 | 6:30 pm
National Geographic
A pesar de lo documentado en la película de «Indiana Jones» sobre la ciudad perdida de Tanis, varios de esos acontecimientos jamás sucedieron en realidad, sin embargo, esta metrópoli sí existió y guarda una de las historias más fascinantes del mundo.
Se cuenta que Tanis era conocida como Djanet, mientras que el Antiguo Testamento se refiere a esta zona como Zoán, aunque actualmente se le llama Sân el-Hagar.
De acuerdo con hechos históricos, se trató de la capital de las dinastías XXI y XXII, durante el gobierno de los reyes tanitas en el Tercer Período Intermedio de Egipto.
Su ubicación privilegiada hizo que se convirtiera en un punto fundamental para el comercio, antes que surgiera Alejandría, no obstante, ocurrieron varios hechos de tipo político que hicieron caer la abundancia de Tanis, por lo que simplemente quedó sumida en una llanura sedimentada con algunos montículos en forma de colina, los cuales fueron considerados como «de poco interés».
Durante muchos años, se pretendió hallar el lugar original, pero no fue hasta 1939 cuando un arqueólogo francés llamado Pierre Montet restituyó Tanis al siglo XX, luego de varios años de excavaciones.
En el proceso de excavaciones, se pudo desenterrar un complejo de tumbas reales que albergaban tres cámaras funerarias que se mantenían intactas e inalteradas; para la fecha, fue un descubrimiento sorprendente.
Asimismo, Tanis estaba llena de tesoros funerarios como máscaras de oro, ataúdes de plata y sofisticados sarcófagos, además de otros objetos preciosos estilo brazaletes, collares, colgantes, vajillas y amuletos.
Los expertos en esta área aseguran que Tanis estuvo por mucho tiempo abandonada, por lo que la ciudad dispone actualmente de varios tesoros arqueológicos aparte de las tumbas, puesto que también se han encontrado templos, como el de Amón y el de Horus, por lo que el sitio continúa recibiendo expediciones para detectar más hallazgos.