por: Yorman Sarmiento
15/04/2024 | 6:00 pm
Restauracion
La historia del café comenzó hace miles de años en Etiopía; se dice que los pastores locales se dieron cuenta de que sus cabras tenían más energía cuando comían una planta local conocida como «keffa», la cual pertenece a la familia de las plantas cafetaleras. Los pastores comenzaron a consumir la planta para darle energía a sus cuerpos y, así, el café nació.
En el caso de la llegada de esta bebida a América, fue a principios del siglo XVII, cuando los viajeros árabes comenzaron a exportar el grano de café de Etiopía a otros países, como Siria y Turquía.
Luego, los marinos holandeses se percataron del interesante producto y comenzaron a comercializarlo en Europa. Y, por último, los ingleses lo importaron a América, donde se difundió.
Te contamos algunas curiosidades del café y sus diferentes preparaciones:
Café Espresso:
El primero se preparó en Italia en el siglo XVIII, se cuenta que para obtenerlo, el método incluía poner el agua caliente en una jarra y hacerla hervir a bajas temperaturas.
Luego, el agua se filtraba por el grano y se escurría lentamente; después se servía en un pequeño vaso de cerámica.
Café Latte:
Nació en la ciudad de Viena, Austria, en el siglo XIX; de acuerdo con documentos históricos, fue un comerciante italiano que llevó el método de café expreso a Viena, donde el chef del café Central, Franz Sacher, preparó el primer Café Latte.
El método original consistía en poner el café expreso en un vaso grande y añadir leche fría.
Café Capuchino:
Se originó en la ciudad de Nápoles, en Italia, en el siglo XVI. El nombre del café viene de la orden de monjes franciscanos, los capuchinos, quienes tenían un hábito con una gorra parecida a la del café, por lo que un día, el método pasó a llamarse así.
El Café Capuchino es un café con leche caliente, y luego se le espuma la parte de arriba.
Café Macchiato:
También es italiano y nació a principios del siglo XX, significa «marchito» y su nombre se refiere al método de preparación.
Se hace un café expreso y se le añade una pequeña cantidad de leche para darle un toque blanco, su sabor es más intenso que el resto y mantiene su sabor pese a la pequeña cantidad de leche.
Café Mocaccino:
Es un café italiano, como muchos otros, pero nació más tarde, a finales del siglo XX. El Café Mocaccino fue inventado por el barista Gianfranco Sanetti en la ciudad de Turín, Italia.
El método de preparación consiste en preparar un Café Macchiato y añadirle chocolate en polvo y canela.
Café Frappé:
Es una bebida helada y también de origen italiano, su nombre se debe a la palabra italiana «frappé», que significa «batido».
El método original consistía en poner una taza helada en una máquina exprés y luego añadir hielo y un poco de agua. Luego se exprimía el café directamente sobre el hielo.
Café Affogato:
Es considerado más bien un postre que un café. El consiste en una dosis de helado de vainilla con un poco de café expreso sobre ella. Se inventó en Italia a comienzos del siglo XX; se sirve tanto en la taza como con un tenedor y cuchara.
Café Americano:
Es una versión del Café Expreso más diluida; la leyenda dice que se creó durante la Segunda Guerra Mundial, porque los soldados americanos creían que el café expreso era demasiado fuerte, así que le añadían más agua.
Los italianos crearon entonces un nuevo tipo de café para agradar a los americanos y así nació el Café Americano.
Cabe destacar que la mayoría de las bebidas cafeteras más conocidas del mundo nacieron en Italia. Este país tiene una cultura del café muy fuerte, y esto se refleja en las muchas variedades que hay.
El Café Americano, el Frappé, el Macchiato, el Cappuccino, el Affogato, y el Café Expreso son solo algunas de las más populares.