por: Elena Velásquez
25/03/2024 | 6:00 pm
La Vanguardia
La Gran Muralla es uno de los símbolos más representativos de China. Su estructura le valió ser considerada como una de las Siete Maravillas del Mundo y, en el año 1987, fue incluida en la Lista del Patrimonio Cultural Mundial por el Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco.
Sin embargo, pese a su fama, su envergadura de entre 21 mil km de largo y su importancia histórica, ha sido objeto de una serie de informaciones y datos inexactos.
Es por eso que, en esta ocasión, te presentamos la verdad detrás de cinco de los mitos más comunes sobre este monumento:
Mito 1: Se ve desde la Luna
Anteriormente, se solía creer que la Gran Muralla China debía ser visible incluso desde el espacio, pero todo apunta a que no es así.
De hecho, se considera que esta falsa apreciación fue popularizada por el ilustrador estadounidense, Robert Ripley, quien aseguraba que dicha construcción sería «la obra más poderosa del hombre» y, por tanto, «la única que sería visible para el ojo humano desde la Luna».
Sin embargo, esta idea «no tiene base científica» e incluso, en el año 2003, los astronautas confirmaron que la muralla no es visible desde el satélite natural del planeta.
Mito 2: Es una sola muralla
Aunque tradicionalmente se emplea el termino de «Gran Muralla» en singular, la verdad es que o se trata de una sola sino de varias.
Esta construcción es realmente un conjunto de murallas y fortificaciones, con secciones que varían en estado y accesibilidad, de las cuales solo algunas secciones «están cuidadas para el turismo», mientras que las demás ya no son más que ruinas y, en la mayoría de los casos, están prohibidas las visitas.
Mito 3: Se construyó para evitar el acceso a los mongoles
Otra idea errónea sobre esta espectacular obra arquitectónica es que se construyó para evitar que los mongoles entraran a China.
Si bien en el siglo XIV los mongoles se convirtieron en una verdadera amenaza para esta región, cuando se comenzó a construir la muralla, este pueblo ni siquiera había aparecido.
De hecho, se estima que como su construcción comenzó en el siglo III a. C., el objetivo de la muralla era proteger al imperio Qin de los Xiongnu, los cuales, posiblemente, habrían sido ancestros de los hunos.
Mito 4: Hay cadáveres enterrados en la estructura
Ciertamente, un historiador de la dinastía Han mencionó la posibilidad de que se hubiesen enterrado cadáveres en la estructura, pero hasta el momento no se han encontrado huesos, ni ningún otro tipo de evidencias arqueológicas que lo confirmen.
Mito 5: El explorador Marco Polo nunca vio dicha muralla
Se suele creer que, como el mítico explorador Marco Polo no destacó una obra de tan inmensas dimensiones en sus diarios y relatos de sus viajes por China, es posible que nunca la viera.
Sin embargo, los expertos consideran que, probablemente, si la habría observado, pero en vista de que visitó la nación asiática mientras los mongoles controlaban el territorio, la muralla no tendría un papel relevante.