por: Jonás Rodríguez
16/08/2021 | 7:00 pm
Pixabay
En ocasiones las personas sienten que el tiempo pasa con mayor o menor velocidad dependiendo de la situación y, en algunas oportunidades, de la edad.
Varios individuos afirman que a partir de cierta edad sienten que los años pasan mucho más rápido que en su juventud.
Sin embargo, los especialistas explican que el tiempo nunca cambia su velocidad, lo que cambia es la percepción del mismo.
Un factor capaz de modificar la percepción del tiempo es la motivación. Al proponerse una meta, el individuo percibe que el correr del tiempo es más veloz y aún más si este objetivo está relacionado a una necesidad básica.
Según un estudio de la Universidad de Alabama, esto se debe a que durante este lapso, los procesos de memoria y atención se minimizan para suprimir emociones y pensamientos irrelevantes.
Por su parte, el psicólogo inglés, Steve Taylor, mantiene la teoría de que la percepción del tiempo está relacionada a la cantidad de información que una persona procesa.
En base a su tesis, Taylor explica que el correr de los años para los niños es más lento por la alta atención que ponen a su entorno y la cantidad de nuevas experiencias que viven. En el caso de los adultos, estos se mantienen por lo general en situaciones rutinarias.
Otra variación en cómo se percibe el tiempo tiene que ver con las experiencias de terror. El neurocientífico David Eagleman, demostró que cuando una persona vive una situación que le asusta, es capaz de almacenar mayor cantidad de información en un corto periodo de tiempo.
Esto ocurre porque se activa una parte del cerebro denominada «amígdala», que hace que se acumulen más recuerdos.
Debido a este proceso los individuos que experimentan acontecimientos aterradores sienten que transcurrió más tiempo del que realmente pasó.