por: Televen
24/06/2024 | 6:00 pm
Vale TV
En las profundidades del mar Caribe, frente a la costa noreste de Venezuela, se esconde un lugar tan singular como extremo: la Fosa de Cariaco.
Esta cuenca marina, con una longitud de 95 kilómetros, un ancho de 30 kilómetros y una profundidad máxima de mil 428 metros, alberga un ecosistema único en el planeta, caracterizado por la ausencia total de oxígeno.
Apodada el «Mar Muerto del Caribe», la Fosa de Cariaco es la segunda cuenca anóxica natural más grande del mundo, después del Mar Negro, y la única de este tipo en aguas marinas abiertas.
Esta peculiar característica se debe a una estratificación extrema de las aguas, donde las capas superficiales ricas en oxígeno se encuentran aisladas de las profundas, creando un ambiente hostil para la mayoría de las formas de vida conocidas.
Sin embargo, la Fosa de Cariaco no está completamente desprovista de vida. En sus profundidades habitan bacterias y arqueas, organismos microscópicos que han desarrollado adaptaciones metabólicas para sobrevivir en este ambiente anóxico.
Estos microbios son los protagonistas de un ecosistema único, basado en el reciclaje de azufre y hierro, y son esenciales para el funcionamiento de este peculiar lugar.
Más allá de su singular ecosistema, la Fosa de Cariaco tiene un gran valor científico. Los sedimentos del fondo marino actúan como un registro histórico, conservando información sobre el clima, los huracanes y la actividad tectónica de la región durante miles de años.