¿Sabías que en México existe una «Cueva de las Serpientes»?

Para los humanos, las serpientes suelen ser fuentes de temor, curiosidad, asombro y peligro, a partes iguales, pero ¿alguna vez has pensado que podrían ser sinónimo de aventura y turismo?

Pues aunque no lo creas, es así y, en México, específicamente en Kantemó, lo entendieron a la perfección. Es por ello que, hace más de 15 años, una empresa social logró abrir, promover y ofrecer una experiencia sin igual en «la Cueva de las Serpientes Colgantes».

Para llegar a este curioso lugar, es necesario viajar a la frontera entre Yucatán y Quintana Roo, hasta llegar al municipio de José María Morelos, donde es necesario tomar la desviación Tihosuco-Valladolid y recorrerla por 20 km, hasta poder tomar la desviación de la carretera municipal Dziuché-Tihosuco, que te llevará a Kantemó tras avanzar otros tres kilómetros.

Una vez que se llega al sitio de la Cueva de las Serpientes Colgantes, la empresa responsable del proyecto ofrece no solo un recorrido guiado por la cueva, sino la posibilidad de conocer los la laguna de Chichancanab y sus alrededores, además de la oportunidad de hospedarse en cabañas o acampar en la zona. Otras de las actividades que se ofrecen  son los recorridos en bicicleta y la observación de fósiles, vida marina y lagartos moreletti.

En cuanto a la visita a la caverna de las serpientes, se sabe que los visitantes pueden explorar la cueva para admirar no solo a las serpientes ratoneras que se asoman entre los huecos en busca de presas, sino también a las seis especies de murciélagos que habitan allí y que, con frecuencia, terminan siendo el alimento de dichas culebras.