¿Sabías que nuestro Jesús de Alva quería ser caricaturista?

Nuestro carismático, Jesús de Alva, nació en Maracaibo, estado Zulia, el 01 de septiembre de 1993, bajo el signo de Virgo; y se desempeña en el medio desde los 14 años de edad.

Pese a que su vida profesional ha estado estrechamente ligada a la Comunicación, su sueño de infancia eras convertirse en caricaturista.

De hecho, asegura que desde niño tuvo un gran don para el dibujo a mano alzada, especialmente con inclinaciones surrealista, hiperrealista y animé.

Asimismo, tiene una gran inclinación por la filosofía al punto de considerarla un pilar esencial en su vida y le atraen otras áreas ligadas a la creación audiovisual como la fotografía y el trabajo detrás de las producciones de vídeo.

Con 16 años se inició en la animación en su ciudad natal y, luego, estudió seis semestres de la carrera de Comunicación Social antes de abandonarla para venir a Caracas, donde posteriormente conseguiría nuevas oportunidades en el área gracias a un par de castings en nuestra casa, Televen, y a su desempeño en un reconocido concurso de belleza.

Tras su participación en el certamen, Jesús hizo su debut en la pantalla venezolana como animador, pero varios años después, sintiendo que la imagen que mostraba ante la pantalla no era su «verdadero ser», decidió apartarse y en el año 2019 optó por buscar fortuna fuera del país.

Su trabajo con una agencia de publicidad le permitió moverse por varios países antes de llegar a México, donde se mantuvo por un tiempo, llegando conseguir una nueva oportunidad para volver a las pantallas de la mano de uno de los más reconocidos canales de televisión mexicano.

Sin embargo, mientras volvía a Venezuela para tramitar la visa y realizar otras diligencias, el mundo se vio sorprendido por la pandemia de Covid-19 y, además, la productora del espacio para el que trabajaría, falleció.

La decepción de ver que el proyecto no prosperó, junto con la presión de hallarse sin un trabajo fijo siendo el pilar de su familia, fueron generándole una sensación de desasosiego que, poco tiempo después, en paralelo con el nacimiento de su hija mayor y la posterior muerte de su hermano; terminó por convertirse en una fuerte depresión de la que consiguió salir buscando «respuestas» en los libros de filosofía y ayuda psicológica.

Fue así como llegó a él una frase de Albert Camus, quien aseguró que «el suicidio es la respuesta a no haber entendido la vida» y, partiendo de allí, Jesús recurrió a la lectura, la meditación, la gratitud y la terapia con base en programación neurolinguistica, para salir de ese foso emocional.

Una vez superada esta dura etapa, decidió aprovechar todos los conocimientos adquiridos para crear su propio proyecto: «Ser y no solo parecer», el cual a su vez, se convirtió en su principal motivación para volver a la pantalla venezolana y llegar a una audiencia más grande.

En su faceta más divertida, Jesús quien se declara un gran fan de Melendi y su canción «Como el agua y el aceite», así como de los perros, los peces, el sushi y el cheesecake keto; suele disfrutar su tiempo libre meditando, leyendo libros de los que luego escribe reflexiones, o jugando videojuegos como Fifa.

También le gusta ver partidos de fútbol, es fanático del FC Barcelona y, como en su niñez practicó baloncesto, asegura que hoy día todavía es bueno encestando.

Asimismo, cabe destacar que tiene fobia a la sangre y entre las cosas que no le agradan figuran el chocolate, el chisme, la crítica y Anuel AA.

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