por: Yesimar Gerdler
22/04/2019 | 11:30 am
@ReutersLatam
Al menos 290 personas perdieron la vida y cerca de 500 resultaron heridas este domingo en atentados con explosivos contra tres iglesias y tres hoteles de lujo en Sri Lanka.
Los objetivos de los ataques fueron varios hoteles de la capital, Colombo, y tres iglesias donde se celebraba la misa de Pascua.
Las primeras explosiones ocurrieron en las templos de San Antonio, San Sebastián de Negombo, ambas pertenecientes a la Iglesia Católica, y el santuario de Sión, en Batticaloa, de religión evangélica.
Por otra parte, los hoteles atacados fueron el Cinnamon Grand, Kingsbury y Shangri-La-; además también se registraron explosiones en el zoológico de Deliwala, al sur de la capital, y en un barrio residencial.
La Policía del país informó que han sido arrestados 24 sospechosos, presuntamente pertenecientes a un mismo grupo. En ese sentido, las autoridades acusaron al poco conocido grupo local yihadista Towheed Jamath, de realizar los ataques con apoyo de una red internacional.
«No creemos que estos ataques hayan sido perpetrados por un grupo de este país solamente», declaró el portavoz del gobierno Rajitha Senaratne, quien afirmó la existencia de «una red internacional sin la que estos ataques no se podrían haber realizado».
El presidente de Sri Lanka, Maithripala Sirisena, emitió un comunicado en el que hizo un llamado para mantener la calma y apoyar a las autoridades con sus investigaciones.
Entre las víctimas mortales se encuentran 35 ciudadanos extranjeros, incluyendo holandeses, turcos, daneses, británicos y estadounidenses.