por: María Fernanda Pérez
19/08/2023 | 5:00 pm
DW
Un equipo internacional de científicos ha encontrado en Brasil unos colgantes triangulares de hueso de perezoso gigante que datan de entre 25 mil y 27 mil años, lo que demuestra que los humanos convivieron con estos animales extintos y que llegaron a Sudamérica mucho antes de lo que se creía.
Los colgantes fueron hallados hace unos 30 años en un abrigo rocoso llamado Santa Elina, en el centro de Brasil. Sin embargo, no fue hasta ahora que los investigadores los analizaron y descartaron la posibilidad de que fueran obra de la naturaleza o de que hubieran sido tallados por humanos miles de años después de la muerte de los perezosos.
«Ahora tenemos pruebas fehacientes –junto con otros yacimientos de América del Sur y del Norte– de que tenemos que replantearnos nuestras ideas sobre la migración de los humanos a América», indicó Mirian Liza Alves Forancelli Pacheco, coautora del estudio y arqueóloga de la Universidad Federal de São Carlos.
De este modo, los científicos utilizaron técnicas de datación por radiocarbono y luminiscencia ópticamente estimulada para determinar la antigüedad de los colgantes y de los sedimentos del yacimiento. También estudiaron las marcas y los agujeros de los objetos, que indican una intención artesanal y un posible uso como adornos personales.
Es así que los resultados contradicen la hipótesis convencional de que los primeros humanos llegaron a América hace unos 15 mil años, cuando el nivel del mar era más bajo y permitía el paso por el puente terrestre de Bering entre Rusia y Alaska.