por: Josmeily Yzquiel
14/10/2022 | 5:30 pm
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Muchas personas podrían enfrentar que su perro padezca de demencia a los 10 años o más de vida. Al igual que los humanos, estas razas caninas son propensos a este trastorno.
Según un estudio que es parte del Proyecto sobre Envejecimiento del Perro, el riesgo de desarrollar el síndrome de disfunción cognitiva canina (SDC) aumenta un 52% después de cumplir los 10 años de edad.
La doctora jefa de la Comunidad Veterinaria de América del Norte, Dana Varble, manifestó que con mucha frecuencia “los propietarios de mascotas piensan que sus perros simplemente están bajando la velocidad y no se dan cuenta de que hay cosas que pueden hacer para aliviar, ralentizar o incluso evitar el deterioro cognitivo a medida que los perros envejecen”.
Añadió que los estudios “demuestran que la actividad mental y el ejercicio son importantes para el bienestar mental de un perro, al igual que en los humanos.
«Estimular el cerebro es importante y esto puede hacerse fácilmente, por ejemplo con platos interactivos de comida», expresó.
Para mantener activo a tu perro existen juguetes que se deben manipular para sacar comida que el dueño le haya escondido en el mismo, estas actividades ayudan a tener ocupado su cerebro.
En ese sentido, Varble dijo que se demostró “que los suplementos nutricionales mejoran los signos y ralentizan el deterioro de la SDC. También hay alimentos especiales para perros que envejecen”.
Entre los meses de diciembre de 2019 y 2020, los investigadores hicieron encuestas a más de 15 mil dueños de perros para el nuevo estudio sobre salud y estado cognitivo de sus canes, para luego agrupar a los mismos por edad y así hacer el análisis correspondiente.
Gracias a ese método de separarlos por edad, observaron que la probabilidad de que un perro obtenga SDC crecía un 68% por cada año después de una década de vida.
Sin embargo, esa cifra cambió cuando determinaron además el tipo de raza, salud existente, la esterilización y la actividad física, el cual se redujo al 52% por cada año adicional de vida.
Debido a esos últimos factores analizados, los autores del estudio no estaban seguros si la inactividad provoca la demencia o viceversa, ya que en el análisis, los perros inactivos de la misma raza y las otras características tenían más probabilidades de padecer de demencia que los activos.
En cambio, en los perros menores de 10 años no se observaron deterioros cognitivos. No obstante, los que tenían antecedes de trastornos neurológicos, oculares o auditivos, tenían un mayor riesgo de deterioro cognitivo.
Durante muchos años, los expertos han estado analizando los síntomas de la demencia canina para poder ayudar a las mascotas en su proceso.
Algunas de las acciones a las que se debe estar atento son:
Los perros con SDC pueden ser un poco lentos al momento de trasladarse por toda la casa y empiezan a deambular como perdidos. Hasta podrían quedarse atorados entre los muebles sin saber cómo salir después.
Además, miran fijamente el suelo, techo o el espacio sin ningún motivo, y en algunas ocasiones no reconocen a los miembros de la familia.
Los canes pueden confundirse entre el día y la noche debido a la demencia, intercambiando sus actividades durante ese tiempo: dormir de día y pasear por la casa durante la noche.
Algunos olvidarán su adiestramiento doméstico a medida que pasa el tiempo, incluso no avisarían cuando necesiten salir para hacer sus necesidades, y al momento de estar afuera se les olvidaría la evacuación.
Su comportamiento puede cambiar a estar más apegado y temeroso, o volverse solitario evitando la interacción con sus dueños.
El SDC puede hacer que tu mascota pierda el interés en su juguete favorito, en otros perros o personas.
Es importante llevar a tu amigo perruno al veterinario a tiempo si tiene alguno de estos síntomas, así podrás proporcionarle una calidad de vida durante este proceso.