por: Inés Reyes
25/07/2018 | 11:30 am
AP
Una serie de atentados suicidas y ataques, incluyendo uno con una moto bomba que estalló en un mercado de verduras, mataron a 38 personas en el sur de Siria este miércoles, dijeron medios estatales.
Los ataques, los peores en los últimos meses, fueron un recordatorio de la horrible violencia perpetrada por la milicia radical, que durante años sembró el caos en un país que sacudido por la guerra civil.
Una televisora estatal mostró imágenes de varios puntos de la provincia de Sweida y de su capital, del mismo nombre, donde se inmolaron los atacantes. El desglose de los fallecidos no se hizo público de inmediato.
Los inusuales ataques en Sweida y en su capital; una ciudad de mayoría drusa, coinciden con una ofensiva del gobierno del presidente Bashar Assad en el sur de Siria, donde sus tropas luchan contra un grupo afiliado al Estado Islámico cerca de la frontera con los Altos del Golán, ocupados por Israel, entre otras zonas.
El Estado Islámico está prácticamente derrotado en Siria e Irak, pero sigue controlando pequeños reductos de territorio en el este y en el sur de Siria.
Desde el inicio de su ofensiva en junio, las fuerzas de Damasco ya habían recuperado antes el control de territorios tomados por los rebeldes en la frontera con los Altos del Golán, y ahora combaten contra los insurgentes en el extremo sur del país.
La cifra de víctimas mortales, que en un primer momento se dijo que era de 27 personas, se incrementó rápidamente.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, también reportó una serie de atentados suicidas y otros ataques en Sweida.
El grupo extremista Estado Islámico se atribuyó el ataque.