Descubre la posición correcta para medir bien la presión arterial

Unos minutos de preparación y una postura correcta son claves para una medición precisa de la presión arterial, lo que permite un diagnóstico y tratamiento correctos.

La presión arterial normal es inferior a 130/80 mmHg, y cifras superiores a 140/90 mmHg indican hipertensión, una afección silenciosa que aumenta el riesgo de infarto y accidente cerebrovascular.

La importancia de una medición correcta

Lo cierto es que la lectura de la presión arterial puede ser inexacta si no se siguen los pasos adecuados. Un error común, destacado por una investigación de la Universidad de Nueva Gales del Sur de Sydney, es no apoyar la espalda durante la medición, lo que puede invalidar el resultado.

Este estudio analizó imágenes de bancos de fotos populares para identificar los errores más frecuentes en la medición.

Asimismo, la postura incorrecta durante la toma, como cruzar las piernas o hablar, altera la medición y puede llevar a diagnósticos erróneos.

Una lectura precisa es fundamental para prevenir complicaciones de salud, especialmente el daño cardíaco y renal.

Pasos para una medición precisa

Para obtener un resultado confiable, es crucial prepararse y adoptar la postura correcta, que incluye:

• Sentarse correctamente: Siéntate en una silla con la espalda recta y apoyada contra el respaldo.
• Posicionar los pies: Mantén los pies planos en el suelo, sin cruzar las piernas.
• Colocar el brazo: El brazo debe estar apoyado sobre una mesa, alineado con el corazón. El manguito debe colocarse directamente sobre la piel para asegurar el contacto adecuado.

Al seguir estas sencillas recomendaciones, se minimizan las variables que pueden alterar el resultado y se asegura una medición más confiable.

¿Qué indican los números?

La presión arterial se mide en milímetros de mercurio (mmHg) y consta de dos valores: la presión sistólica (máxima) y la diastólica (mínima).

• Menos de 130/80 mmHg: Se considera un rango normal.
• Más de 140/90 mmHg: Se diagnostica como hipertensión.