Estos son los beneficios de bañarse con agua fría

Para muchos, la idea de tomar una ducha fría en la mañana no resulta un concepto agradable. Sin embargo, cada vez más personas se suman a la tendencia de adoptar este hábito por todos los beneficios que aporta a la salud física y mental.

De acuerdo a una investigación realizada en los Países Bajos, las personas que se duchaban con agua fría tenían menos posibilidades de faltar al trabajo por una enfermedad, escenario contrario al de personas que lo hacían con agua caliente.

Para llegar a esa conclusión, se dividió a más de 3 mil personas en cuatro grupos y se les pidió que tomaran una ducha con agua caliente a diario.

A uno de los grupos se le dijo que la terminaran con 30 segundos de agua fría, a otro con 60 segundos y a otro con 90, todo esto mientras que otro grupo podía ducharse completamente con agua caliente, protocolo que continuó durante un mes para todos.

Tras el seguimiento, se determinó que aquellos grupos que se ducharon con agua a una temperatura fría presentaban una reducción de bajas laborales del 29%.

Si bien aún se desconoce por qué el agua fría puede influir de tal manera, algunas investigaciones indican que pueden estar vinculadas al reforzamiento del sistema nervioso.

Según un estudio hecho en República Checa la inmersión en agua fría tres veces por semana durante seis semanas contribuye a la estimulación ligera del sistema inmunitario de los jóvenes atléticos que participaron en la evaluación. A pesar de esto, se requieren más pruebas para confirmar los resultados.

Igualmente, el agua fría pareciera estar relacionada a la activación del sistema nervioso simpático, esa parte del sistema nervioso que gobierna la respuesta de «lucha o huida.» Cuando se activa durante una ducha, se genera un incremento en la hormona noradrenalina.

Además, se le ha vinculado con la optimización de la circulación, el mejoramiento de la función cerebral, la pérdida de peso y para aliviar síntomas de la depresión.