por: Edgar Pilca
10/07/2025 | 7:30 pm
Pixabay - Imagen Referencial
¿Imaginas que escuchar música clásica pudiera mejorar tu salud intestinal? Un reciente estudio, publicado en la Revista International Journal of Molecular Sciences, reveló una conexión fascinante entre la famosa Sonata para dos Pianos en Re Mayor, K.448 de Mozart, y el bienestar de nuestro sistema digestivo.
La investigación descubrió que tan solo dos horas de exposición nocturna a la K.448 de Mozart, específicamente en tono Re, tiene un impacto significativo en la fortaleza de la barrera intestinal. Este hallazgo abre una puerta intrigante a terapias no invasivas para problemas digestivos.
Los científicos detrás de este estudio evaluaron meticulosamente el impacto de diferentes tonalidades de la K.448 de Mozart (Re, La y Sol) en aspectos cruciales como la barrera intestinal, la inmunidad y la microbiota. Los resultados fueron sorprendentes:
La clave está en el tono
Entre las tonalidades analizadas (Re, La y Sol), la investigación destacó que el tono Re de la K.448 de Mozart fue el más eficaz en generar estos efectos positivos. Esto sugiere que ciertas frecuencias sonoras específicas podrían actuar como una herramienta no invasiva para favorecer la integridad de la barrera intestinal y la resiliencia inmunitaria.
Este estudio innovador subraya que la exposición a la Sonata K.448 de Mozart no solo refuerza la barrera intestinal, disminuye la permeabilidad y fortalece la inmunidad local, sino que también fomenta una microbiota favorable.