¿Quieres cuidar tu piel? El protector solar será tu mejor aliado

El sol es una fuente de vida, pero también puede ser un enemigo para nuestra piel si no tomamos las precauciones necesarias.

La exposición excesiva a los rayos ultravioleta (UV) puede causar daños irreversibles en nuestra salud, como quemaduras, manchas, arrugas, alergias e incluso cáncer de piel.

Por eso, es fundamental usar protector solar todos los días, no solo en verano o cuando vamos a la playa, ya que es un producto cosmético que contiene filtros que bloquean o absorben los rayos UV y evitan que penetren en nuestra piel.

¿Qué tipo de protector solar elegir?

Existen diferentes tipos de protectores solares según su forma de aplicación, su factor de protección solar (FPS) y su composición.

A la hora de elegir el adecuado, debemos tener en cuenta nuestro tipo de piel, el tiempo de exposición al sol y las condiciones climáticas.

Forma de aplicación: Pueden presentarse en forma de crema, loción, gel, o aerosol. Cada uno tiene sus ventajas e inconvenientes, pero lo importante es que se apliquen correctamente y de forma uniforme sobre toda la superficie de la piel.

Factor de protección solar (FPS): El FPS indica el nivel de protección que ofrece el protector solar frente a los rayos UVB, que son los que causan las quemaduras solares.

Cuanto mayor sea el FPS, mayor será la protección. Sin embargo, ninguno ofrece una barrera total, por lo que se recomienda evitar la exposición al sol entre las 10:00 am y las 4:00 pm, usar ropa adecuada y sombrero y buscar la sombra siempre que sea posible.

¿Cómo y cuándo usar el protector solar?

Para que sea efectivo, se deben seguir unas pautas básicas de uso:

• Aplicar el protector solar media hora antes de salir al sol, para que tenga tiempo de penetrar en la piel y crear una capa protectora.
• Reaplicar el protector solar cada dos o tres horas, o después de cada baño o actividad física que implique sudoración.
• Usar una cantidad suficiente de protector solar para cubrir toda la superficie de la piel expuesta al sol.
• No olvidar las zonas más sensibles o propensas a quemarse, como las orejas, el cuello, el escote, las manos, los pies y el cuero cabelludo.
• Usar un protector solar específico para el rostro, ya que la piel del rostro es más delicada y necesita un cuidado especial. Además, se puede elegir un protector solar con color o con efecto mate para mejorar el aspecto estético.
• Usar un protector solar adecuado para los niños y los bebés, ya que su piel es más vulnerable al sol y necesita una protección más alta y más segura.

¿Qué beneficios tiene?

Usar protector solar tiene múltiples beneficios para nuestra piel y nuestra salud:

• Previene el cáncer de piel.
• Retrasa el envejecimiento de la piel.
• Es hidratante.
• Prolonga el bronceado.