por: Redacción
19/12/2017 | 6:10 pm
Imagen referencial - Pixabay
Las lágrimas son aquellas que salen cuando estamos tristes, cuando reímos, cuando sentimos dolor o alguna emoción, pero hay algunas cosas que no conocemos de ellas.
Estas se componen de ácidos grasos producidas por las glándulas del párpado, de una parte intermedia acuosa y de un componente mucínico. Si alguna de ellas fallara, aparecerían patologías como el síndrome del ojo seco.
La función de las lágrimas es proteger la cornea, nutriéndola y mejorando su calidad.
Después de mantener el ojo húmedo, las lágrimas continúan por la zona interna del ojo y llegan hasta la nariz, por eso cuando lloramos mucho, el drenaje de la nariz es también abundante.
Existen varios tipos, la primera es la lágrima basal, y su función es mantener lubricado y libre de polvo al ojo.
El segundo tipo es la refleja, aparece cuando algo te irrita, como al cortar una cebolla o al estar expuesto a diversos gases, y el objetivo es limpiar al ojo de estas partículas extrañas.
La más común, es la lágrima producto del sollozo, y esta se genera a través de las emociones, ya sea tristeza, un dolor intenso, felicidad, entre otros.
Existe también, la lágrima psíquica, que sigue siendo un misterio científico, no se sabe porque lloramos en respuesta al dolor físico o trauma emocional, pero puede ser una forma de manifestar a los demás nuestro estado mental.