por: María Fernanda Pérez
22/05/2025 | 9:30 am
EFE
El Tottenham Hotspur puso fin a una sequía de 18 años sin títulos, al conquistar la Europa League este miércoles en Bilbao.
Un autogol de Luke Shaw a los 42 minutos de juego fue suficiente para que los «spurs» se impusieran por la mínima (1-0) al Manchester United en una emocionante final disputada en San Mamés.
Este título marca la tercera vez que el Tottenham conquista la Europa League, añadiéndola a sus logros de 1972 y 1984. La última vez que el club londinense saboreó la gloria de un trofeo fue en la Copa de la Liga de 2008, lo que subraya la importancia de esta victoria .
Desde el inicio, el partido fue intenso y con ocasiones para ambos lados, pero el Tottenham mostró mayor iniciativa en los primeros compases, generando varias oportunidades que presagiaban el gol.
La jugada decisiva llegó casi al final de la primera mitad. Un centro desde la izquierda de Sarr, que buscaba a Johnson, se desvió en el defensor del United, Luke Shaw, y terminó en el fondo de la red, dejando al portero Onana sin posibilidades de reacción. Este autogol resultó ser el momento clave que inclinó la balanza a favor del Tottenham y le dio la ventaja con la que se fue al descanso.
En la segunda mitad, el Manchester United salió decidido a revertir el marcador, ejerciendo una intensa presión sobre la portería de Vicario.
Los «red devils» tuvieron varias oportunidades claras, destacando una milagrosa salvada de Micky van de Ven bajo los palos que impidió un gol casi cantado. A pesar del asedio, la defensa del Tottenham, liderada por un Vicario que alternó buenas paradas con momentos de nerviosismo, logró resistir los embates del rival.
Finalmente, el pitido del árbitro confirmó la victoria del Tottenham, que pudo celebrar un ansiado título que pone fin a casi dos décadas de frustraciones.