por: Elena Velásquez
10/06/2023 | 1:30 pm
Primicia
El informe anual de la organización Somos Defensores reveló que, durante el año 2022, 197 defensores de Derechos Humanos (DDHH) fueron asesinados en toda Colombia.
De acuerdo a la información, el número de homicidios contra este grupo se elevó un 42% en relación al año 2021, lo que refleja un incremento considerable en las agresiones contra dirigentes sociales en el país sudamericano y «una tendencia de persistencia de la violencia selectiva en el país».
El documento refiere que, la cifra de asesinatos a defensores de DDHH del último año casi iguala a la registrada en el 2020, cuando la organización dató 199, siendo este «el número más alto de personas defensoras asesinadas en un año confirmado».
«Para el Programa Somos Defensores sigue siendo de suma preocupación la persistencia de la violencia contra las personas defensoras de derechos humanos y liderazgos sociales (…) Que este tipo de casos siga incrementándose preocupa porque decenas de personas siguen siendo asesinadas cada año y los procesos sociales de los que hacían parte se ven seriamente afectados sin que existan medidas efectivas para frenar esta situación», expresaron.
Asimismo, se reconoció que «todas las formas de violencia son graves y generan afectaciones a las vidas de quienes defienden los derechos», puesto que además de los homicidios, también se contabilizaron «840 agresiones de diferente tipo que muestran la diversidad de hechos violentos a los que se enfrentan los liderazgos sociales y las personas defensoras de derechos humanos».
Por otro lado, Somos Defensores aseguró que el «cambio de partitura», correspondiente al cambio de mandato entre Iván Duque y Gustavo Petro, tampoco ha supuesto un cambio en las estadísticas de asesinatos de defensores, auqnue si se vislumbró «un panorama de reconfiguración de las dinámicas de conflicto armado con una geometría variable territorial compleja».
«Nos encontramos así en un interludio en el que la melodía es diferente a la que sonaba en años anteriores, más calmada, más esperanzadora (…) pero el 2022 fue el año más cruel para los líderes sociales en cuanto a cantidad de asesinatos», escribieron.