por: Edgar Pilca
25/05/2025 | 12:30 pm
Francesco Ungaro en Pexels
El alto costo de la vida ha empujado a los británicos a abandonar a sus mascotas y dejarlas en refugios, donde la capacidad se ve limitada.
De acuerdo con los reportes de medios locales, en los últimos años hubo un aumento en los números a medida que las personas toman la desgarradora decisión de abandonar a sus compañeros animales, al no poder costear los gastos para cuidarlas.
Desde gatitos en cajas hasta periquitos abandonados en la oscuridad de la noche son algunos de los casos que han recibido quienes trabajan en los refugios de mascotas.
Los dueños de animales que luchan por sobrevivir sienten «mucho dolor y frustración por tener que tomar estas decisiones».
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«Detrás de cada animal que acogemos hay una historia humana», dijo Elvira Meucci-Lyons, jefa del refugio Mayhew en Kensal Green, al oeste de Londres.
La situación forma parte de un aumento generalizado en todo el Reino Unido, donde decenas de miles de mascotas han sido abandonadas desde la pandemia de COVID-19 y el inicio de la crisis por la inflación.
El año pasado se notificaron alrededor de 22.500 casos en total, un aumento de más del siete por ciento respecto a 2023.
El desafío de costear el cuidado de los animales plantea un problema desgarrador para muchos en Reino Unido, una nación de amantes de los perros y los gatos donde la mitad de la población adulta tiene una mascota.