Rusia reconoció independencia de regiones ucranianas, Donetsk y Luhansk

Este martes, 21 de febrero, el Presidente de Rusia, Vladímir Putin, ordenó el envío de tropas a las regiones de Donetsk y Luhansk tras reconocer la independencia de ambas entidades, las cuales están inmiscuidas, desde hace varios años, en un conflicto separatista con el Gobierno de Ucrania.

En este sentido, las autoridades euroasiáticas aseguraron que dicho decreto tiene como objetivo «cumplir con funciones de mantenimiento de paz».

Tras un largo discurso, Putin firmó el documento en el que otorgó reconocimiento oficial a Donetsk y Lugansk como estados independientes de Ucrania.

«Considero necesario tomar una decisión que desde hace tiempo caía por su propio peso: reconocer de inmediato la independencia y la soberanía de la República Popular de Donetsk y de la República Popular de Lugansk», precisó.

Aunque se desconoce el alcance de la autorización, los expertos han explicado que con esta medida, las tropas rusas podrán situarse en dichas regiones, las cuales están ubicadas al este del territorio ucraniano.

Luego de las acciones del gobierno euroasiático, el Presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, aseguró que se trata de «una violación de la soberanía y la integridad territorial» por parte de Rusia, sin embargo, reiteró que su país «no tiene miedo de nada ni de nadie».

«Es muy importante ver ahora quién es nuestro verdadero amigo y socio y quién seguirá intimidando a la Federación Rusa solo con palabras», declaró el Jefe de Estado ucraniano.

Según las opiniones especialistas, la decisión de Moscú «agrava severamente» la crisis existente entre Rusia y Occidente en relación a Ucrania, razón por la cual existe el temor de que se genere una «guerra de grandes dimensiones».

Hasta la fecha, los reportes en la frontera ruso-ucraniana han registrado el despliegue de unas 150 mil tropas rusas, mientras que Estados Unidos y sus aliados de Europa y la Otan han ofrecido apoyo material y diplomático a Kiev ante esta «amenaza inminente contra su integridad territorial».

De hecho, en una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU, todos los países participantes, a excepción de Rusia, solicitaron «respetar la integridad territorial de Ucrania».

En relación a ello, el embajador ucraniano ante el consejo, Sergiy Kyslytsya, afirmó que el mundo debe «hacer frente» a Rusia, puesto que el Kremlin está siguiendo el mismo protocolo que usó cuando reconoció a los separatistas de Georgia en 2008.

Por su parte, la representante rusa, Vassily Nebenzia, comentó que existe un «pánico infundado» con respecto a la invasión y que su país «no quiere un baño de sangre» en la nación vecina.

De igual forma, defendió la necesidad de resguardar las áreas rebeldes respaldadas por su nación ante cualquier «agresión» del ejército ucraniano.

Además, las autoridades euroasiáticas reiteraron que si Ucrania se une a la Otan, se convertirá en «una amenaza directa a la seguridad de Rusia».

Al respecto de este tema, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, expresó su rechazo a las acciones rusas y aseguró que su bloque «reaccionará» con unidad y firmeza.

«El reconocimiento de los dos territorios separatistas en Ucrania constituye una flagrante violación al derecho internacional, a la integridad territorial de Ucrania y a los acuerdos de Minsk (…) La Unión Europea y sus socios reaccionarán con unidad, firmeza y con determinación en solidaridad con Ucrania», puntualizó.

Entre otros mandatarios que rechazaron la medida figuran el primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson; la canciller de Canadá, Melanie Joly; y el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien anunció que planea prohibir que empresas y ciudadanos norteamericanos realicen actividades comerciales con Donetsk y Luhansk.

Adicionalmente, el Gobierno de Alemania anunció el bloqueo de la certificación del gasoducto Nord Stream 2 como medida disciplinaria contra la decisión rusa.

En este mismo sentido, el alto representante para la Política Exterior y de Seguridad de la Unión Europea, Josep Borrell, informó que este mismo martes los representantes del ente se reunirán en París para estudiar aplicar sanciones al Gobierno ruso.

«Estoy seguro de que la decisión será tomada por unanimidad (…) Estamos trabajando ya en la preparación de los textos y esta tarde el Consejo decidirá las sanciones», concluyó.