Así es la casa más angosta del mundo, ubicada en Michoacán

Ubicada en el corazón de Uruapan, Michoacán, México, se alza una peculiar vivienda que desafía las nociones tradicionales de espacio.

Conocida como la casa más angosta del mundo, esta propiedad ha capturado la atención de locales y extranjeros por igual, no solo por sus diminutas dimensiones, sino también por la rica historia que guarda entre sus paredes.

¿Dónde se encuentra y cuánto mide?

La célebre casa se localiza específicamente en Carrillo Puerto Número 50, colonia de San Juan Bautista, en Uruapan. Sus medidas son tan inusuales como impresionantes: 1.42 metros de ancho por 10.20 metros de largo.

En su punto más estrecho, la casa llega a medir apenas un metro, y el acceso al baño se reduce a solo 89 centímetros de ancho, requiriendo incluso un puente removible sobre las escaleras para cruzar.

Estas dimensiones le valieron el Récord Guinness como la casa más angosta del mundo en 1999, consolidando su estatus como una verdadera maravilla arquitectónica.

Una historia de ingenio y vida familiar

La historia de esta casa se remonta a 1980, cuando Jorge Melgoza Sepúlveda, un vendedor de carnitas, la adquirió por 20 mil pesos con la intención inicial de usarla como bodega.

Sin embargo, en 1985, la propiedad fue construida como vivienda y terminó siendo el hogar de Jorge, su esposa y sus dos hijos hasta 2013. Durante casi tres décadas, la familia Melgoza demostró que es posible llevar una vida plena en un espacio reducido.

Google Maps/Fabienne Thönen

Así, la casa llamó la atención por primera vez en 1989, cuando fue mencionada en un programa de televisión, y desde entonces se ha convertido en un atractivo turístico que recibe visitantes de diversas partes del mundo, incluyendo Estados Unidos, Colombia, Cuba, El Salvador y Argentina.

A pesar de sus reducidas dimensiones, la casa cuenta con cuatro pisos que distribuyen ingeniosamente la sala, cocina, baño y recámaras. Para moverse entre niveles, es necesario ascender por una estrecha escalera, e incluso agacharse al subir al segundo piso para evitar chocar con el techo.

Actualmente, la vivienda no está habitada, pero conserva muebles y fotografías que permiten a los visitantes imaginar la vida cotidiana de la familia Melgoza. La casa está abierta al público con tours guiados, a menudo liderados por miembros de la propia familia, quienes comparten anécdotas y detalles que hacen del recorrido de 15 a 20 minutos una experiencia fascinante.

Aunque existen otras propiedades que compiten en estrechez, como la construida por el arquitecto polaco Jakub Szczesny (que mide entre 92 centímetros y 1.52 metros), la casa de Uruapan sigue ostentando con orgullo su título Guinness y representa un testimonio del ingenio y la adaptabilidad humana.