por: Edgar Pilca
14/10/2024 | 7:30 pm
Denys Nevozhai/Unsplash
La playa de arena negra de Reynisfjara es uno de los paisajes volcánicos más emblemáticos de Islandia, donde la arena negra brillante se desliza hacia el mar y las formaciones rocosas de basalto se retuercen y giran.
Fotógrafos de todo el mundo acuden en masa a esta parte de la isla para capturar imágenes espectaculares del mar espumoso contra la arena negra, que ha sido el telón de fondo de muchas películas y series de televisión, como «Juego de Tronos», «Vikingos», «Rogue One: A Star Wars Story», «Star Trek: Into Darkness» y «Noah».
Además de la arena negra y los imponentes farallones, los otros fenómenos geológicos que atraen a los visitantes a la playa de Reynisfjara son las columnas de basalto.
Las retorcidas formas hexagonales parecen imposibles y como si debieran ser artificiales, pero en realidad están formadas por lava enfriada, al igual que la arena negra.
Pese a su imponente paisaje, la playa Reynisfjara es peligrosa y misteriosa. Según datos de medios locales, el océano Atlántico Norte que baña la costa es conocido por sus poderosas corrientes y olas que pueden arrastrar a los desprevenidos hacia mar adentro en cuestión de segundos.
Además de ello, el agua en Reynisfjara es extremadamente fría, lo que puede provocar hipotermia rápidamente si alguien cae al mar. Las rocas volcánicas que bordean la playa son muy resbaladizas cuando están mojadas y pueden provocar caídas y lesiones graves.
A esto se le suman los acantilados, que se elevan sobre la playa son inestables y pueden desplomarse sin previo aviso, especialmente después de fuertes lluvias o vientos.
Por lo tanto, recomiendan tomar precauciones y asesorarse bien a la hora de visitar dicho destino.